La semana pasada el Rectorado de le Universidad de Málaga acogió el IV Congreso Internacional de Periodismo, organizado por la Fundación Manuel AlcántaraUn foro que se cerró con debate en torno al tema Cuando el entrevistador es la estrella: control del yo con la participación de locutores con larga trayectoria profesional como Carlos Alsina y Jesús Quintero, así como el escritor Fernando Sánchez Dragó, que llegó a presentar telediarios en la Telemadrid controlada por Esperanza Aguirre. Sin embargo, el debate está circulando activamente por las redes sociales por el sonado enfrentamiento que mantuvieron Alsina y Quintero, con Dragó apoyando a éste último, en torno a si antes se hacía mejor radio y televisión que ahora. 

"No entrevistarías a Pedro Sánchez porque no te puedes lucir"
"Estáis un poco nostálgicos, estáis en una añoranza de un tiempo maravilloso que ya no existe, yo creo que nunca existió y está en vuestra cabeza, en la que se hacían en radio y televisión grandes productos, grandes entrevistas… no como ahora que hacemos un producto malo. Esto forma parte del paso de los años", alertó Alsina sobre el discurso de sus compañeros, acusándoles de jugar "con enorme ventaja" porque ponían ejemplos de grandes entrevistados y ese no es el perfil "al que los futuros periodistas se van a enfrentar" y en el que el mérito "es de el entrevistado" y no de las preguntas. En ese sentido lamentó la recomendación que habían hecho de no entrevistar a políticos mientras Sánchez Dragó defendía que él no entrevistaría por ejemplo a Pedro Sánchez porque lo considera aburrido. "
No le entrevistarías porque no te puedes lucir como entrevistador, la dificultad de entrevistar a un político es la de hacerlo con alguien que sabes que no quiere decir nada nuevo y no quiere responderte a lo que le preguntas, y a pesar de eso hacer un buen género", le reprochó Alsina. 

El enfrentamiento se puede ver a partir del minuto 46 en este vídeo: 

"Interrumpiendo con voz de teleñeco..."
A partir de ahí se activó la mecha de Quintero, quien mandó el siguiente recado a Alsina: "
Lo que yo no soporto es una entrevista de un reportero, no de un gran comunicador, no de un hombre culto ni profundo, interrumpiendo constantemente y el otro sin decir nada, un mandamiento sagrado del periodismo es escuchar, y lo hacen [interrumpir] además con voz de teleñeco". "No crean, no son artistas… hacen un producto muy malo, la basura conecta con la basura", estalló el locutor sobre los periodistas actuales insistiendo en que no iba a seguir por ese lado. [Alsina mantuvo un sonado enfrentamiento en una entrevista con Mariano Rajoy por su insistencia para que respondiera]

"Yo soy un cobarde y tú un valiente, enhorabuena Jesús"

Quintero llegó a mantener que ahora se deja hacer las entrevistas "a los pringados" y Alsina entró al trapo: "Los que estamos ejerciendo el periodismo es porque somos unos vendidos, ya me lo sé todo esto". El debate subió de tono con las alusiones generacionales y con un Quintero levantándose continuamente nervioso: "No me vengas con las demagogias la juventud no es un momento es un estado del alma, tú puedes ser un cobarde y yo un valiente, yo puedo echarle cojones y tú no". "Yo soy un cobarde y tú un valiente, enhorabuena Jesús", concedió Alsina. Los momentos más tensos continuaron con otro choque en torno a la superior calidad de la radio de los años 30. Dragó intentaba alinearse con las posturas de Quintero pero se quedaba fuera del debate y pedía la intervención del moderador. 

"Estoy prohibido, esto es lo que aplaude el señor Alsina, ¡vaya un compañero!", protestó Quintero en un momento dado. Alsina reclamó que no le atribuyeran palabras que no había dicho y elogió profesionalmente al enfadado locutor: "Si yo tuviera capacidad de decisión en una emisora contrataría a Jesús, pero no por eso pienso que los programadores actuales sean bobos". 

Siria y las masturbaciones de Cebrián
Otros momentos tensos se produjeron cuando Sánchez Dragó recomendó a los futuros periodistas buscarse la vida marchándose por ejemplo a Siria y "contar una historia" y Alsina le recordó que allí "secuestran a los periodistas". "Si te secuestran son gajes del oficio", resolvió Dragó. A Alsina también le recordaron desde el auditorio su tensa entrevista a Juan Luis Cebrián, que ante preguntas sobre su patrimonio salió por la tangente apuntando que le podía preguntar por las veces que se masturbaba pero no iba a contestar. "Si el entrevistado te autoriza a preguntarle cuántas veces se masturba tienes que decidir si se lo preguntas o no, allí se abrió un agrio debate periodístico sobre si yo había cometido una negligencia profesional perdiendo una oportunidad de entrar en la parte más humana del personaje (o las más 'a mano') o si le ahorraba eso a los oyentes", ironizó el de Onda Cero. Apuntó que se lo tomó como "una provocación" para desviar la atención y que él volvió al tema de Star Petroleum "que era de lo que estábamos hablando".