El Juzgado de Instrucción 39 de Madrid ha admitido a trámite la querella presentada contra Fidere Residencial por la familia de Arancha Mejías, presidenta de la Asociación de Afectados de la venta de pisos protegidos del Ayuntamiento de Madrid. En su auto, la jueza ve posibles "delitos de coacciones y discriminación".

Arancha Mejías había denunciado que Fidere, socio del fondo Blackstone, no le renovaba el contrato de alquiler como "represalia por ser la cara visible" de la lucha contra esta macrooperación inmobiliaria.

En el escrito de la jueza, al que ha tenido acceso ELPLURAL.COM, se indica que "se procede" a la "admisión a trámite" de la querella, que firma el padre de la presidenta de la Asociación de Afectados por la venta de las viviendas.

Miguel Oñate Pino, el hombre de Fidere

La jueza considera que "los hechos que resultan de las anteriores actuaciones presentan características que hacen presumir la posible existencia de delito de coacciones cuya instrucción corresponde a este órgano judicial, según los artículos 14.2 y 15 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal".

En su auto, la jueza cita a declarar, el 3 de enero próximo, a Miguel Oñate Pino, presidente de Fidere Residencial, que gestiona las viviendas sociales del Ayuntamiento de Madrid compradas por el grupo Fidere, la empresa usada por el fondo Blackstone para ejecutar la operación.  Oñate Pino es quien firmó la carta enviada a la familia Mejías, en la que se comunicaba la decisión de no renovarle el contrato.

1.860 viviendas
Blackstone, a través de Fidere, se quedó con 1.860 viviendas protegidas vendidas en la etapa de Ana Botella al frente del Ayuntamiento de Madrid. Estos inmuebles habían sido alquiladas a familias desfavorecidas, muchas de ellos a través de contratos con opción a compra, como es el caso de la familia de Arancha. 

El juez no ha querido reabrir la causa

La Asociación de afectados ha pedido la reapertura de la causa -también lo ha hecho la EMVS recientemente- después de que el juez Juan Antonio Sáenz de San Pedro Alba, decretara el cierre provisional del caso el año pasado y que la Audiencia Provincial de Madrid desestimara posteriormente un recurso de apelación. pero aún no ha habido ninguna respuesta por parte del juez.


La denuncia de Arancha
La presidenta de la asociación de afectados denunció que Fidere actuaba contra ella como "venganza", después de que declarara ante la comisión de investigación del Ayuntamiento de Madrid que analizó la venta de las viviendas: “Hay otras familias a las que se les vence el contrato en la misma fecha y no han recibido ninguna carta anunciándoles que finalizará el contrato de arrendamiento, al contrario, a algunos les ha llegado la información de que Fidere se reunirá con ellos para actualizar su contrato”, explicaba Arancha Mejías a ELPLURAL.COM en septiembre pasado.