El Fondo de Becas Soledad Cazorla ha sido distinguido con el premio "Silver Rose" en el Parlamento Europeo (PE) por su labor social, y pidió a la Unión Europea (UE) visibilizar a los niños huérfanos por culpa de la violencia de género y favorecer así ayudas que les protejan. "La sociedad que no ha sabido proteger a sus madres tiene que protegerlos a ellos ahora y tratar de que su vida sea lo más normal y tenga las oportunidades que no tendrían de otra manera sin ayuda especial", dijo a Efe el promotor del Fondo, Joaquín Tagar, que recibió el premio en un acto el Parlamento Europeo en Bruselas.

Tagar, viudo de Soledad Cazorla, la primera mujer Fiscal de Sala contra la Violencia sobre la Mujer, puso en marcha en 2016, junto a sus tres hijos y la Fundación Mujeres, un Fondo para otorgar ayudas a los niños que han perdido a su madre como consecuencia de la violencia machista para contribuir a su desarrollo personal y educativo, así como a la reparación del daño causado.

El Fondo, que ahora cuenta con la contribución de varias empresas, busca "enfocar a estas víctimas para que la sociedad sea consciente de que existen y de que necesitan ayuda" y que la fiscal Cazorla definía como "las víctimas colaterales más débiles", y de las que solo hay estadísticas específicas en España desde 2013. En cinco años, 189 menores se han quedado huérfanos como consecuencia de la violencia de sus padres, a los que se suman 23 menores víctimas mortales por esta causa, según datos de diciembre de 2017.

Tagar subrayó que en la mayoría de países de la UE no existen estadísticas sobre estos menores, por lo que pidió, al recibir el premio, "un estudio sobre la realidad actual de los niños huérfanos de la violencia de género". "Dado que en algunos países no está considerada la "violencia de género" pero sí la violencia doméstica. Un estudio sobre esta realidad nos ayudaría mucho a que las instituciones y los gobiernos empezaran a atender a estos menores víctimas", argumentó.

Tagar, quien destacó la red de fiscales contra la violencia de género puesta en marcha en españa desde 2004, que cuenta hoy con unos cincuenta miembros, hizo un llamamiento a las instituciones europeas y citó la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, que establece que "el interés superior del menor constituirá una consideración primordial". En este sentido se preguntó "¿esto se está dando?" en los países europeos.

"En España no se está dando. Cuando en violencia de género se produce un asesinato, muchas veces el niño tiene que seguir viendo al padre. Y algunos podrían contar cuál es la reacción de ese niño al ver al padre. Naturalmente le tienen terror", afirmó, en presencia de hijos de mujeres asesinadas a manos de sus parejas que acudieron al acto. La eurodiputada socialista Elena Valenciano, que entregó el premio, destacó del Fondo Soledad Cazorla que "pone el foco en una realidad poco hablada, sobre la que no suele haber mucha reflexión ni soluciones". También destacó la necesidad de impulsar "que sean los gobiernos los que se hagan cargo de esta situación terrible", algo que pidió "armonizar" porque "es una realidad que existe en toda Europa".

"Hablamos mucho de violencia de género y de las mujeres víctimas pero hablamos muy poco de los niños y de las niñas, de los huérfanos o huérfanas", lamentó, y animó a "otros países a que sigan este ejemplo" y ocuparse de "los que más sufren" la violencia de género y "los más olvidados". Las becas del Fondo Soledad Cazorla abarcan desde ayuda psicológica a refuerzos para el estudio o contribuciones para el desarrollo de estudios universitarios.

Los premios "Silver Rose", que llegan este año a su vigésimo quinta edición, son concedidos por SOLIDAR, impulsada por los socialistas europeos y agrupa a 60 organizaciones civiles de 27 países de toda Europa. Los premios, divididos en cinco categorías, reconocen a aquellas iniciativas que promueven con éxito la justicia social, entre ellos el que ha recaído en el proyecto español.

También fue distinguida en esta edición la organización Sintraimaigra, de Colombia, por su apoyo a las mujeres trabajadoras domésticas que pelean por sus derechos laborales y luchan contra la violencia en su entorno laboral.

Con información de EFE