Ocurrió el miércoles en una entrega de premios. El titular de Justicia, Rafael Catalá, cerró el acto con un recuerdo al  fallecido Fiscal General del Estado, José Manuel Maza. Confesó el ministro que había mantenido una gran amistad con el desaparecido y que en los últimos meses se habían visto poco, por aquello de que se pudiera decir algo sobre la relación entre el ministro del ramo y el máximo responsable de la Fiscalía del Estado (con el asunto de Cataluña de por medio). Pero, en esos momentos lamentó los ratos no disfrutados en estos últimos meses, los cafés, las conversaciones, la música...

Catalá dice estas cosas y no pasa nada. ¿Será que nos vamos acostumbrando a que la Justicia sea a la carta para los señoritos del PP? También cabe que tengan una suerte increíble. A ver: para juzgar los Papeles B del extesorero Luís Bárcenas, la Audiencia Nacional ha decidido apartar al juez de Diego, que insistió en la conveniencia de que Mariano Rajoy Brey se presentara como testigo. Testificó en persona, sí, pero sus declaraciones parecieron un relato de ciencia ficción.

¿Será que nos vamos acostumbrando a que la Justicia sea a la carta para los señoritos del PP? 

Por cierto, que entre los magistrados que adoptaron aquella decisión, figuraba la recusada Concepción Espejel, “querida Concha” para María Dolores de Cospedal. Y en el lugar de Julio de Diego tenemos ahora a Juan Pablo González, de carácter  conservador y quien fue aupado en su día al Consejo General del Poder Judicial por el partido de Rajoy Brey. Da la casualidad de que uno de los senadores que le votó favorablemente para el cargo figura en los mencionados papeles. Juan Pablo González será ahora el ponente en este caso.

Sí, hay que concluir que la fortuna mira de frente a los populares. Fíjense si no en la negativa de una mayoría de los jueces de la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia  Nacional a entregar a la comisión de parlamentaria de investigación que analiza la supuesta financiación ilegal del partido que lidera Rajoy. Es decir, tres informes clave sobre el caso de la caja b del PP, elaborados por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional. Pero, la Justicia se los niega sus señorías.

Así pues, señor Catalá, yo creo que su amistad con el Fiscal General no puede sorprender a nadie. Hace tiempo que tenemos la intuición de que hay más leña de la que arde en estos nombramientos y en estas historias de tribunales. Recuerdo a otro ministro de Justicia, en este caso socialista, Mariano Fernández Bermejo quien coincidió en una cacería con el juez Baltasar Garzón que se encontraba a la sazón investigando el caso Gürtel y el Partido Popular le montó tal escándalo  que finalmente el ministro dimitió. Y eso que Garzón y él no eran amigos como en este otro caso. Como escribió Antonio Gala: "Los políticos honrados se quitan de en medio cuando cae sobre ellos la sospecha".