Que a la derecha no le ha gustado nunca la libertad de expresión es algo que todos sabemos. Por eso no me ha sorprendido la iniciativa del Partido Popular para acabar con el anonimato en las redes sociales. Sí, amigos, el partido cuya sede está pagada en B y cuyo presidente da ruedas de prensa en plasma está muy preocupado con este tema. ¿Lograremos saber entonces quién se esconde detrás del famoso M.Rajoy?
Entrevistamos al misterioso político "del sobre" que prefiere ocultarse en el anonimato, más conocido como Emepunto. pic.twitter.com/I26yK157by
— M. Rajoy (@robotronk1) 30 de noviembre de 2017
En serio, no es de recibo:
Los que quieren acabar con el anonimato en Twitter podían preocuparse más por el anonimato en Suiza, Panamá o Islas Vírgenes, no?#YoNoSoyBOT
— Bender El Que Ofende (@BenderOfuscado) 30 de noviembre de 2017
No van contra el anonimato, van contra Twitter:
Twitter se convirtió en un lugar diferente porque la gente debatía y bromeaba fuera de los márgenes de la corrección social. Twitter sin anonimato sería un lugar convencional de gente convencional, sería Facebook.
— Kim Jong-un (@norcoreano) 30 de noviembre de 2017
La gaviota de Génova es un animal realmente dañino:
El #PP quiere acabar con el anonimato en twitter para terminar con los insultos y amenazas, es sólo una escusa, lo cierto es que quieren controlar las redes sociales. pic.twitter.com/PZiwowwYLN
— elkoko (@Elkokoparrilla) 30 de noviembre de 2017
Todos recibimos amenazas en insultos en la red, pero para eso están los jueces. Lo de prohibir el anonimato es un brindis al sol. Este hilo lo explica muy bien:
No se puede prohibir el anonimato en redes sociales. Lo explicaremos.
— Almeida (@bufetalmeida) 30 de noviembre de 2017
Persigamos las amenazas, no a los tuiteros:
Algunos no queremos que persigan el anonimato. Sino a quien amenaza. Cosa bien distinta. https://t.co/s902352sug
— Ana Pastor (@_anapastor_) 30 de noviembre de 2017
La propuesta del PP es absurda. Vivimos en la era de Gran Hermano, nadie escapa al control:
En la práctica, el anonimato en Twitter es casi inexistente: Tu IP queda registrada en sus servidores. Basta una llamada para saber quien eres.
— Críptica (@CripticaOrg) 30 de noviembre de 2017
Se trata de intimidar:
Lo de acabar con el anonimato es una medida para intimidar, porque cuando alguien escondido bajo un pseudónimo ha cometido un delito, se le ha encontrado y procesado sin problema.
— Kim Jong-un (@norcoreano) 30 de noviembre de 2017
Es algo que ya viene de antiguo:
"Es inadmisible el anonimato. De otra forma, la web se convertirá en un inmenso almacén de basura".
— David Bravo (@dbravo) 30 de noviembre de 2017
No es una declaración del PP por su nueva propuesta estelar. Es de Pedro Farré, de SGAE... Hace 12 años. Porque los intentos de controlar internet, vienen de antiguo.
Pero más antiguo es el derecho al anonimato:
El derecho al anonimato existe desde siempre. Ya en el SXVIII el Barón d'Holbach publicaba bajo seudónimo sus escritos contra la religión porque si no le mataban. Y estos señores quieren ahora cargarse eso. Vergüenza https://t.co/DMLM38WYI7
— Stéphane M. Grueso (@fanetin) 29 de noviembre de 2017
Lo dicen hasta las Naciones Unidas:
Naciones Unidas sobre el #anonimato en la red: "permite ejercer los derechos de libertad de opinión y expresión y merece una PROTECCIÓN fuerte" https://t.co/L1Vm7LNCDc pic.twitter.com/aq7QTOZ5tv
— PDLI (@PDLI_) 30 de noviembre de 2017
La invasión de bots rusos también ha tenido que ver:
Si se acaba el anonimato pasaré a llamarme "Bobovich Estropajov".
— Bob Estropajo (@BobEstropajo) 30 de noviembre de 2017
Algún aspecto bueno sí tiene la medida:
El gobierno prohibirá el anonimato, por fin descubriremos a los autores del Lazarillo de Tormes y el Cantar del Mio Cid.
— Profeta Baruc (@Profeta_Baruc) 29 de noviembre de 2017
¡Nunca podrán con nosotros!
Los tuiteros renunciaremos al anonimato cuando el futbolista misterioso renuncie al suyo. pic.twitter.com/xspw43sbYU
— Roboto (@mekausi) 30 de noviembre de 2017