Las películas nos prometían ciudades futuritas llenas de luces y construcciones vanguardistas. Ciudad sin calles propiamente dichas, porque los coches volarían. De hecho, es la gran crítica que hacemos a la ciencia ficción, habernos estado en el tema de los vehículos flotantes. Pero ¿y si lo auténtico de las ciudades del futuro no fueran los coches voladores sino los coches inexistentes?

El distrito económico

Al paso que vamos, si tenemos en cuenta que uno de los principales problemas de las grandes ciudades es la contaminación y que el transporte privado es responsable en grado sumo de esta cuestión, la idea es lógica. Y es lo que van a poner en práctica en Corea del Sur. La idea no es una experiencia piloto en un barrio suburbial. Se va a implementar nada menos que en el innovador barrio de negocios que se lleva construyendo desde 2002. El International Business District (IBD) fue diseñado y se está construyendo de forma que sus habitantes no necesiten el vehículo privado en sus desplazamiento. Con una inversión de 35.000 millones de euros, la planificación de este barrio económico prioriza las áreas peatonales, potencia el transporte público y establece itinerarios en bici que recorren toda la ciudad.

Espacio hiperconectado

El IBD se está construyendo en la ciudad de Songdo, a 65 kilómetros de Seúl. Se trata de 6 kilómetros cuadrados de tierra recuperada al mar. Además de un centro de convenciones y edificios de oficinas, la ciudad contará con viviendas, escuelas y servicios culturales de alta gama. Todo con el despliegue tecnológico que en las últimas décadas está convirtiendo a Corea del Sur en una potencia mundial del sector. Además del enfoque ambientalista, la ciudad será un banco de pruebas de lo que ls smartcities serán en el futuro. Un entorno hiperconectado en el que todos los sistemas, tanto residenciales como médicos o comerciales estarán vinculados entre sí, de manera que se reduzcan considerablemente las necesidades de desplazamientos.