Tarde, mal, con cuentagotas y de modo aleatorio. Así está funcionando la justicia entorno a la extinción masiva que estamos causando. Pero cuando llega una noticia así parece que hay esperanza. La considerada “reina del marfil” ha sido sentenciada a 15 años de prisión en Tanzania.
Yang Fenglan fue acusada de traficar con los colmillos de más de 350 elefantes. Y en el proceso, embolsarse millones de dólares durante al menos una década. Fenglan comerciaba de manera ilegal con el marfil en países de toda Asia. Fenglan siempre ha defendido su inocencia, presentándose como una mujer de negocios china en África. Sin embargo, el tribunal no creyó sus argumentos y, en el mismo proceso, condenó a otros dos hombres tanzanos por los mismos cargos.
Esta sentencia es el último hito en la guerra declarada por las autoridades de Tanzania a los furtivos y comerciantes ilegales. La investigación sobre las actividades de Fenglan se iniciaron a principios de los años 2010. En 2015 fue detenida cuando conducía su lujoso vehículos por las calles de Dar es Salaam.
Comerciante de especias
“La reina del marfil” llevaba una vida de tapadera como comerciante de especias y gerente de un restaurante desde los setenta. Pero el fiscal de Tanzania no tiene dudas de que Fenglan utilizaba sus redes comerciales en Asia para traficar con marfil, prohibido desde hace años en el país africano.
También en China se prohibió la importación de este material en 2017. Pero los conservacionistas aseguran que estas prohibiciones no son suficientes y recuerdan que en menos de una década, la población de elefantes ha caído desde el medio millón hasta poco más de 100.000.
