África siempre ha sido sinónimo de vida salvaje. De parajes en los que puede admirarse a los últimos grandes animales en su hábitat. Y en los últimos tiempos también entra en los discursos sobre la pérdida de esta biodiversidad. En este caso son las águilas y buitres africanos son los que presentan números alarmantes

20.000 metros cuadrados

La Universidad de Ciudad del Cabo ha realizado un estudio sobre la situación de rapaces y carroñeros. Un análisis que ha abarcado más de 20.000 kilómetros cuadrados en el área de Bostwana. El resultado es que en esta zona han desaparecido el 80% de estas grandes aves con respecto al anterior censo. realizado. 

Este cálculo anterior se realizó hace veinte años centrado, como en esta ocasión en las zonas de caza y cría de águilas y buitres, al norte del país. Para conseguir llegar a parajes de difícil acceso fue necesario emplear vehículos 4x4. El conteo se realizó a simple vista, localizando las aves a simple vista y extrapolando los datos en cada cuadrante sujeto del estudio. 

En todo el continente

No es solo una mala noticia el fuerte descenso de grandes pájaros en Bostwana. Los expertos aseguran que esta bajada es extrapolable a todo el continente africano, especialmente en África del oeste. Aunque los zoólogos no esperaban que el descenso fuera tan radical. 

Lo que hace más relevante el escaso número de águilas y buitres detectados son las condiciones concretas de un país como Bostwana. Esta nación tiene una demografía mucho menor que otros países densamente poblados en el continente. Además, cerca del 40% del país son espacios especialmente protegidos para la fauna.