El secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha propuesto este viernes derogar la reforma laboral de 2012 "para crear un marco laboral de contratos indefinidos" y "una prestación mínima garantizada de 600 euros al mes", además de una "semana laboral de 34 horas sin reducción salarial". Iglesias ha hecho estas propuesta ante empresarios catalanes, y ha defendido la formación de un Gobierno de coalición entre el PSOE y su partido: "Sería bueno para España, para las empresas y para Cataluña". El político madrileño ha expuesto estas ideas en el XXXV Reunión del Círculo de Economía, que se celebra estos días en Sitges (Barcelona) y que reúne a lo más granado de la élite empresarial catalana. 

Si ayer el presidente de la Generalitat, Quim Torra, fue recibido con una mezcla de indiferencia y hostilidad por los empresarios, la intervención de Iglesias despertaba mucha expectación y no ha defraudado a los asistentes, que han realizado numerosas preguntas y acudido en mayor número que ayer. El líder de Podemos ha desgranado todas las propuestas de Podemos en el terreno económico y fiscal, entre ellas medidas medioambientales y la reducción del impuesto de sociedades del 25% al 23% para pymes que facturen menos de un millón. También ha traslado su propuesta de "más impuestos" entre los que ha destacado subidas del IRPF para los que ganen más de 100.000 euros, Impuesto de Patrimonio y un impuesto a la banca. Y, de paso, ha afeado al PSOE acercarse a Cs en los últimos días: "No se puede decir una cosa en campaña y hacer otra después".

Pactos postelectorales e influencias modestas

Ha admitido que todas las fuerzas deben dialogar, pero ha opinado que un eventual pacto entre PSOE y Cs supondría una traición al electorado socialista: "No es una buena noticia perder la coherencia a la hora de establecer alianzas. Incumplir en exceso el sexto mandamiento puede ser una falta de respeto para los electores".

También ha insistido en que lo fundamental para llegar a un acuerdo con el PSOE es pactar un programa y cómo desarrollarlo, asegurando que no será un problema abordar qué ministerios asume cada uno: "¿La cuestión de los ministerios? Esto es lo de menos".

"No se trata de pedir sillones, sino de comprometerse con la necesidad de reformas, y eso es lo que nosotros queremos: empujar esas reformas desde el Gobierno", ha concluido Iglesias, que ha reconocido como "modesto" su peso en el Congreso -42 escaños-, pero a la vez importante para impulsar cambios.

Además, Iglesias ha considerado que su propuesta tiene un amplio aval ciudadano, ya que el sondeo del CIS de este jueves no deja lugar a dudas y "la mayoría de ciudadanos en España prefieren un gobierno de coalición progresista" entre el PSOE y Podemos. Así, ha concluido que lo fundamental no son las carteras ministeriales sino "negociar los equipos, cómo se implementan y quién los implementan", y ha citado dos ejemplos de coaliciones que, a su juicio, han funcionado: los ejecutivos autonómicos de la Comunidad Valenciana y de Baleares.

Una coalición PSOE-Podemos "buena para la economía"

Ha insistido ante los empresarios en que este gobierno de coalición también sería bueno para el sector económico: "El gran reto que nuestra economía debe acometer es profundo y de largo recorrido, y eso exige un Gobierno de coalición estable y coherente, sostenido en una base parlamentaria sólida". Un día después de que la ministra de Economía, Nadia Calviño, afirmara que "no es productivo deshacer, revertir o reformar las reformas" como la del mercado laboral, Iglesias ha discrepando y ha reivindicado la derogación de las dos últimos reformas laborales.

El líder de Podemos ha defendido que las reformas laborales de 2010 y 2012 se hicieron en nombre de la creación de empleo y la lucha contra la temporalidad, y "sin embargo no han servido para ninguno de los objetivos que se proponían". Para Iglesias estas dos reformas han generalizado los contratos de duración corta, los bajos salarios y los contratos a tiempo parcial no deseados, al tiempo que ha mantenido elevadas las tasas de temporalidad: "La viejas recetas se han mostrado fracasadas". Como alternativa, ha planteado una "verdadera ofensiva contra la precariedad" que pase, entre otras cuestiones, por transformar los contratos temporales en indefinidos, y limitar la temporalidad a un uso puntual de seis meses.

También ha recordado que medidas que se preveían como dañinas para la economía, como el aumento del salario mínimo interprofesional, han terminado teniendo efectos positivos. Y enlazando con ello, ha cargado contra el Banco de España, que "ha pedido esta semana que los hogares españoles ahorren, pero previamente recomendó reformas laborales que han tenido como consecuencia bajadas salariales continuas. Es imposible ahorrar con los sueldos que hay en este país", ha criticado.

Los empresarios piden "sensibilidad"

El presidente del Círculo de Economía, Juan José Brugera, ha agradecido de "manera especial" la presencia de Iglesias, destacando que el líder morado ha querido acudir a la cita de Sitges pese a que no ha pasado ni una semana de las últimas elecciones y el panorama político está en plena confección de pactos municipales y autonómicos.

También le ha formulado varias demandas, como "estabilidad política, previsibilidad normativa y sensibilidad hacia las necesidades del mundo productivo", y le ha reclamado que la fragmentación política que hay en España, por ejemplo en el Congreso, no vaya en detrimento de la política del diálogo y del acuerdo.