No es hasta el momento en el que hay que cambiarse de vivienda cuando se repara en ellas, pero las empresas de mudanzas están siempre ahí, cumpliendo con su cometido. Las dificultades en las casas de muchas familias españolas ha hecho que algunas personas ofrezcan sus servicios de transporte de mercancías sin declarar por ello y esto ha llevado a que el sector se resienta. Tanto es así que la Federación de Empresas de Mudanzas (FEDEM) ha querido que se tomaran cartas en el asunto y por ello se ha celebrado un encuentro entre un centenar de ellas donde, entre otras cosas, se ha hablado de la realidad con la que cuentan en su VII Congreso Nacional. Algunas de las conclusiones a las que llegaron es que se requiere una formación específica y, por supuesto, una lucha contra el intrusismo profesional, de tal manera que cuando alguien busque, por ejemplo, una empresa de mudanzas en Madrid siempre recurra a los profesionales cualificados para esta labor.

Como era de esperar la competencia desleal se hizo más fuerte en España entre los años 2009 y 2013, pero aún quedan vestigios de lo que fue. Tal punto se alcanzó que la facturación llegó a reducirse en hasta un 45% a nivel nacional, lo que llevó también a un aumento en el número de despidos. Los retos de este sector pasan por renovar sus flotas e informar a todos los trabajadores sobre las nuevas normativas y orientaciones en material medioambiental en los vehículos. Pero el que estas empresas prosperen también tiene que ver con que el mismo público sepa de la importancia de recurrir sólo a ellas.

Como una mudanza puede llegar a ser una pesada carga que sólo lleve a estrés y pérdida de tiempo y dinero, hemos querido recopilar los pasos básicos a seguir para contar con una mudanza profesional y rápida al mejor precio.

  1. Hacer limpieza. Antes de ponerse a embalar nada lo importante es ver qué es lo que, de verdad, se quiere uno llevar a la nueva casa. No hay mejor momento que ese para deshacerse de todas esas cosas que ya no tienen valor o que, simplemente, han dejado de usarse. Es una buena manera de irse más ligeros y, por tanto, ahorrar dinero en transporte. Cuantas menos cosas, mejor.
  2. No hace falta vaciar todo. A excepción de los objetos pesados (como libros) muchos de los muebles pueden transportarse sin complicaciones con todo lo que tienen en su interior. Lo importante en este punto es asegurar todo bien y proteger el mueble en sí para el trayecto que se vaya a hacer.
  3. Contrata servicios profesionales en tu zona. Si, por ejemplo, el traslado se va a llevar a cabo en la capital lo mejor será buscar una empresa de mudanzas en Madrid, en lugar de una que tenga que llegar desde fuera para hacerse cargo de ese servicio porque su tiempo se pagará igualmente y ese será un extra.
  4. Objetos blandos en bolsas de basura. Tales como cojines, edredones o almohadas. Es la mejor manera de trasportarlos y sirven para tapar huecos en el camión de mudanzas, con lo que se ayuda a amortiguar todo lo que se lleva.
  1. Pon una etiqueta identificativa a todas las cajas para saber qué hay en ellas sin necesidad de abrirlas.