"España cuenta en su legislación actual con casi 40 tipos de contrato de trabajo, algo que habrá que simplificar en un único contrato a jornada completa con cláusulas comunes para todos los nuevos trabajadores, y otro para fomentar la contratación a tiempo parcial", escribe el titular de Economía en su tribuna “Nuestro plan para reanimar España”, en The Wall Street Journal.

Rajoy ya había defendido el contrato único
Lo cierto es que a pesar del optimismo de los líderes sindicales, ya en julio pasado, Rajoy había defendido la fórmula del contrato único en una conferencia para presentar un libro de una treintena de economistas liberales. Rajoy afirmó que "las empresas necesitan dotarse de mayor flexibilidad interna y tener un contrato único para poder funcionar”. El contrato único que reclama la CEOE establece una indemnización por despido de 20 días por año trabajado, frente a los 33 o 45 de la legislación actual.

Suprimir la negociación colectiva
En su tribunal en The Wall Street Journal, De Guindos también critica el actual sistema de negociación salarial. En su opinión, ha sido "una de las principales razones que han provocado la pérdida de competitividad que ha sufrido España la última década", por ello aboga por suprimir la negociación colectiva y vincular el aumento salarial a la productividad y no al IPC.

Salarios según productividad
El titular de Economía considera que los sueldos deberían fijarse en función de la productividad y no en la inflación y carga contra los convenios sectoriales. Según su criterio, este modelo en el que priman más los acuerdos sectoriales o los autonómicos sobre los estatales y que restan peso a los de empresa, han sido "la principal razón de pérdida de competitividad" que ha sufrido el país en la última década.

La consolidación fiscal
El titular de Economía y Competitividad se refiere en su artículo a la consolidación fiscal, que considera “un requisito para garantizar la confianza de los inversores y la sostenibilidad" de las cuentas públicas y la estabilidad macroeconómica del país.

El argumento del déficit del 8%
En busca de esa consolidación fiscal, explica De Guindos, el Gobierno adoptó un “paquete duro de recortes de gastos y un aumento progresivo en el impuesto del IRPF". Y para justificar las medidas recurre al mismo argumento usado por el PP en España: “han sido necesarias para compensar el impacto del inesperado salto en el déficit público en 2011 a 8% con respecto al 6% inicialmente previsto".

Una ley de consolidación fiscal antes de cerrar marzo
El ministro explica que se está desarrollando una ley que reforzará la consolidación fiscal, que se promulgará antes del 31 de marzo. para imponer límites de gasto a todas las entidades públicas del territorio nacional, incluyendo la Administración General del Estado, las comunidades autónomas y los ayuntamientos y corporaciones locales. “El sector público, en su totalidad, no podrá superar un déficit estructural de más del 0,4% del PIB o acumular débito por más del 60%”, ha precisado.

"El Gobierno sabe cómo revitalizar la economía y generar empleo"
En su artículo, De Guindos asegura que el Gobierno “sabe qué tipo de medidas tenemos que adoptar con urgencia para revitalizar la economía, generar empleo y mantener un crecimiento sostenible”, porque “entendemos perfectamente las razones que han llevado a nuestro país a alcanzar unas escandalosas cifras de paro -el 22,9% de la población activa el pasado mes de noviembre.