La escasez en la producción de dióxido de carbono (CO2) en el Reino Unido ha puesto en peligro la producción de cerveza y refrescos en el país. Según alertó hoy la directora de la Asociación Británica de Cerveza y Pubs (BBPA), Brigid Simmonds, "ya se está deteniendo la producción" de cerveza debido a esta carencia de CO2, necesario para carbonatar este tipo de bebidas. El Reino Unido cuenta sólo con dos plantas de producción de dióxido de carbono, de las cuales una está cerrada por mantenimiento, lo que ha agravado la situación.

Además, otros cinco productores en el norte de Europa están paralizados también por labores de mantenimiento de cara a concentrarse en la producción de fertilizantes a base de amoníaco en invierno, de acuerdo con Gasworld, proveedora mundial de información sobre gas, que fue la primero previno del problema. Según dicha firma, los productores de bebidas carbonatadas están "desesperados" en medio de "la peor crisis de suministro de CO2 durante décadas".

La BBPA, que representa a cerveceros y a 20.000 pubs en el Reino Unido, confirmó que se han comenzado ya a registrar paros en la producción de cerveza por este motivo, aunque no especificó marcas. Hasta el 82 % de la cerveza que se consume en el país es de producción propia y requiere dióxido de carbono.

Simmonds afirmó hoy que se ha puesto en contacto con los productores de CO2 que le dijeron que podrían volver a su nivel habitual de producción a principios del mes de julio. La directiva lamentó que no hubieran previsto esta situación, en un momento en el que la demanda de cerveza registra máximos, debido a las altas temperaturas de las que está disfrutando el país en las últimas semanas y al Mundial de Fútbol de Rusia.

Por su parte, el director general de la Asociación Británica de Bebidas Gaseosas, Gavin Partington, manifestó que los productores de refrescos están "tomando medidas para mantener su servicio a sus clientes", lo que incluye "trabajar con sus proveedores y buscar fuentes alternativas de C02".