Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 2.804 millones de euros en 2017, según ha informado la compañía eléctrica que además anuncia  que propondrá en su próxima junta de accionistas el reparto de un dividendo de 0,32 euros brutos por acción, un 3,2% más que en 2016.

La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán ha achacado el crecimiento del beneficio, un 3,7% superior al del año pasado, a los negocios de Redes, principalmente en Estados Unidos, y Renovables, así como a la integración desde septiembre de Neoenergia en Brasil, y a pesar del mal comportamiento de la generación eléctrica en España por el impacto de la peor sequía en los últimos 20 años.

Ingresos por la rebaja fiscal de Trump

La reforma fiscal en Estados Unidos, aprobada el pasado mes de diciembre por Donald Trump y que supone la mayor rebaja de impuestos a las empresas en décadas, implicó un impacto neto positivo de 1.284 millones de euros, que Iberdrola ha destinado casi en su totalidad a provisiones y ajustes de valor de ciertos activos, lo que ha reforzado su perfil de negocio según informa la compañía. En 2017, la filial de Iberdrola en Estados Unidos (Avangrid) aumentó su beneficio neto ajustado un 6%, hasta los 682 millones de dólares (553,8 millones de euros).

En cuanto a las inversiones, el año pasado alcanzaron los 5.891 millones de euros, un 38% por encima de las de 2016. La eléctrica ha anunciado que proyecta inversiones de 32.000 millones hasta 2022,  "lo que le permitirá sentar las bases para un crecimiento sostenible futuro", afirma la empresa. Más del 90% de las inversiones previstas para dicho periodo se destinará a los negocios de Redes (50%), Renovables (37%) y Generación contratada en México (4%), áreas que aportarán más del 80% del resultado bruto de explotación (Ebitda) en 2022. El grupo mantendrá inversiones en curso por valor de 9.000 millones de euros al final del periodo, que permitirán continuar incrementando los resultados más allá de 2022.

Iberdrola espera alcanzar en 2022 un beneficio neto de entre 3.500 y 3.700 millones de euros y mantener su política de remuneración al accionista, creciente en línea con los resultados. El beneficio neto esperado implicaría alcanzar un dividendo de 0,4 euros brutos por acción al final del plan. De momento este año propondrá a la junta general de accionistas, convocada para el próximo 13 de abril, una remuneración anual con cargo a 2017 de 0,32 euros brutos por acción, un 3,2% más que en 2016.