El operador de infraestructuras de telecomunicaciones Cellnex Telecom ha obtenido un beneficio de 33 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 5,7% menos que en 2016, por las mayores amortizaciones y costes financieros asociados al crecimiento del grupo.

En cambio, el ebitda de la compañía ha aumentado en este período un 24,5%, hasta los 259 millones, y los ingresos se han incrementado hasta septiembre un 11,3%, alcanzando los 579 millones, según la información remitida a la CNMV, el regulador bursátil.

El director financiero de Cellnex, José Manuel Aisa, explica que el resultado neto del grupo, ligeramente inferior al de 2016, “está aguantando bien”, teniendo en cuenta que viene impactado por las mayores amortizaciones (+28%) que está realizando la empresa, así como por los mayores costes financieros (+58%) asociados a las inversiones ejecutadas.

Recuerda, en este sentido, que Cellnex ha destinado desde 2016 más de 1.400 millones de euros a operaciones de crecimiento en Francia, Holanda, Italia, Reino Unido y Suiza, un paquete de inversiones que forma parte de los más de 2.000 millones de euros para nuevos proyectos anunciados para el período 2016-2017 y cuya ejecución se extiende hasta 2022.

La previsión de la compañía es cerrar el ejercicio 2017 con un beneficio similar al de 2016, cuando ganó 40 millones, y un ebitda cercano a los 352 millones de euros, “en la banda alta del rango previsto”. “Como crecemos, nos endeudamos, y ello comporta mayores costes financieros”, remarca el directivo.

El consejero delegado del grupo, Tobías Martínez, señala que desde 2015 hasta la fecha Cellnex ha cerrado diez transacciones en seis países, con una inversión global de 3.000 millones de euros, y que ello le ha permitido diversificar las fuentes de ingresos por mercados geográficos.

El 41% de los ingresos y del ebitda de Cellnex se genera ya fuera de España, e Italia se ha consolidado como el segundo mercado más importante, con un 32% del total.

Por líneas de negocio, los servicios de infraestructuras de telecomunicaciones aportan el 59% del total de ingresos, con un crecimiento del 21% respecto a 2016, hasta los 340 millones, mientras la actividad de infraestructuras de difusión supone el 31%, con 179 millones.

Por su parte, el negocio centrado en las redes de seguridad y emergencia y soluciones para la gestión inteligente de infraestructuras urbanas aporta un 10% de los ingresos, con 59 millones de euros.

La empresa que preside Francisco Reynés cuenta actualmente con 20.035 emplazamientos de telecomunicaciones (7.758 en Italia, 7.475 en España y 4.802 en Holanda, Francia, Reino Unido y Suiza), así como 1.233 nodos.

En lo que va de año, las inversiones operativas han alcanzado los 57 millones de euros, en su mayoría vinculadas a operaciones de mantenimiento o de mejora de la eficiencia, mientras las inversiones en nuevas adquisiciones han ascendido a 716 millones.

El pasado julio, por ejemplo, Cellnex adquirió a Wind el 10% del capital de Galata y en septiembre cerró la adquisición a Infracapital del operador holandés Alticom.

La deuda neta de la compañía asciende ahora a 2.090 millones, frente a los 1.499 millones de cierre de 2016, pero ésta es estable, a largo plazo, con un coste medio de aproximadamente el 2% y con referencia en su mayoría a tipo fijo.

No obstante, remarca José Manuel Aisa, Cellnex cuenta con acceso a liquidez inmediata, entre tesorería y deuda no dispuesta, por valor de 1.600 millones de euros más.