Como es de esperar, los datos de empleo en los meses de verano parecen despertar un sentimiento "esperanzador" en el Gobierno, quien no duda prometer [todos los años] una "notable mejoría" en la tasa de empleo en los meses que vienen después de las vacaciones: un hecho que a la larga se sabe poco acorde con la realidad. 

El verano de 2017 no iba a ser distinto: según los datos publicados este miércoles por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo [antes INEM], ha caído en 26.887, creándose un total de 56.200 empleos

De esta manera, el número de desempleados registrados se sitúa en 3.335.924 [el nivel más bajo de los últimos años], y el número de cotizantes alcanza ahora los 18.489.329. 

Por regiones, el paro ha bajado en un total de 12 Comunidades Autónomas: una lista encabezada por Galicia [-7.794], seguida de Andalucía [-4.245] y Cataluña [-4075]. 

En lo respectivo a los sectores, el de servicios ha registrado la mayor bajada del número de parados con 17.656 desempleados menos. A este le sigue la industria [-5.257], la construcción [-4.143] y el colectivo de personas sin empleo anterior [-539]. Por el contrario, la subida se ha registrado en el sector de la agricultura y la pesca, registrando un total de 708 personas. 

En lo que se refiere a la contratación. el número de contratos durante el mes de julio se ha situado en 1.928.639, un 6,19% más que en el mismo periodo del año anterior. De este total, 151.998 han sido indefinidos, mientras que el resto [1.776.641] han sido temporales: lo que viene a ser un 92,11%.

Baja el paro, ¿pero a costa de qué?

Para empezar, julio es un mes muy favorable para el impulso del empleo por el aumento del volumen turístico en España: una realidad que, sumada a la precariedad y corta duración de los contratos, facilita registrar un mayor número de afiliados a la Seguridad Social con respecto a los 9 meses restantes del año. 

Porque lo que no destaca el Gobierno es la reducción de los desempleados inscritos en tan sólo 336 personas, situando la cifra de desempleo en 379.492. Además, afiliación a la Seguridad Social ha disminuido en el último mes en 13.576 personas: un hecho que no ha hecho más que romper la tendencia de los últimos meses

De esta forma, y según afirma Comisiones Obreras de Madrid [CCOO] en un comunicado emitido a raíz de los últimos datos del paro, "el empleo crece de forma insuficiente, y lo hace a costa de la temporalidad y con una base poco sólida". 

"El ritmo insuficiente de creación de empleo es injusto, incrementa la desigualdad, y condena a miles de trabajadores a la pobreza y  la exclusión"

Nada más lejos de la realidad. Mucho más si se tiene en cuenta los datos particulares en la Comunidad de Madrid, donde todavía no se ha recuperado el empleo destruido durante la crisis, y el paro disminuye, además, más despacio que en el conjunto del país: un 0,1% frente a un 0,8%.

"Es necesario reducir el desempleo en otras 170.000 personas más"

Desde CCOO Madrid señalan que una parte de los desempleados son personas que terminan sus contratos en los meses de verano. Una "casualidad" que puede ser la que "decore" los datos de empleo registrados todos los veranos, y que, además, invitan al Gobierno a hacer promesas muy alentadoras

Concretamente, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dejado claro en su cuenta oficial de Twitter una de sus metas: conseguir que 20 millones de personas estén trabajando en 2020.

"Sería necesario reducir el desempleo en otras 170.000 personas más, solamente para recuperar la situación previa a la destrucción de empleo de los últimos años. Además, el colectivo de 379.441 personas desempleadas no mejora su situación", señalan desde CCOO Madrid. 

El empleo precario sigue aumentando

Otro de los datos es el continuo crecimiento de los empleos precarios: aquellos donde la temporalidad y las jornadas parciales marca el mercado laboral. En concreto, y según especifican desde este sindicato, en el último mes supusieron el 85,66% de los 221.877 contratos realizados. Además, en lo que va de año, son temporales el 83,24% de los contratos

La consecuencia directa es la creación de la tasa de temporalidad, que según los datos de la Encuesta de Población Activa [EPA] del último trimestre, se sitúa casi en el 20%: una razón que revela que [a pesar de la elevada contratación] la afiliación ha disminuido en 13.576 personas en el mes de julio

Desde UGT expresan que la mejora de la afiliación se encuentra marcada por la precariedad y derivada del abuso de la temporalidad y de la contratación a tiempo parcial involuntaria.

Según la secretaria de Políticas Sociales, Empleo y Protección Social de UGT, María del Carmen Barrera, los datos de paro y afiliación a la Seguridad Social del mes de julio reflejan "claramente un continuado aumento de la actividad y el empleo", pero destaca el empeoramiento de la calidad del mismo.

 ¿Qué hay de los colectivos vulnerables?

A toda la situación de generación de empleo insuficiente y de baja calidad, se suma la de los colectivos más inestables que sufren con mayor fuerza la lacra del desempleo. 

Estos son los parados de mayor edad [con menos oportunidades de conseguir un empleo], parados de larga duración [que van quedando excluidos de todas las prestaciones], mujeres con tasas de actividad más baja y nivel de desempleo superior al de los hombres, y por último, los jóvenes: esos que sufren especialmente la temporalidad de los contratos

La desigualdad de empleo entre mujeres y hombres también se hace notar: mientras que entre ellos se reduce ligeramente el desempleo, entre ellas vuelve a incrementarse en el mes de julio en más de 2.000 desempleadas, suponiendo ya el 58,1% de las paradas inscritas. 

En lo respectivo a los demandantes de empleo sin ocupación que no reciben ninguna prestación es de 220.452: una situación especialmente grave cuando los datos de la EPA indicaban que el porcentaje de hogares con todos sus miembros en paro sigue superando el 6%

Desde UGT abogan por el refuerzo de las políticas de protección por desempleo, así como ampliar las prestaciones contributivas y asistenciales. "Es fundamental analizar todos los programas de protección para los empleados con mayores dificultades con el fin de poner en marcha un verdadero plan de choque por el empleo".

Desde CCOO insisten en "no aceptar medidas que, para incrementar el acceso al empleo, empeoren y precaricen aún más la calidad del mismo". "El ritmo insuficiente de creación de empleo y la baja calidad en un contexto de crecimiento económico es injusto, incrementa la desigualdad y condena a miles de trabajadores a la pobreza y la exclusión".