El 11 de julio se celebra el Día Mundial de la Población, establecido en 1989 por el Consejo de Administración del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo para centrar la atención en la urgencia e importancia de las cuestiones relativas a la población.

Aprovechando esta celebración, el sindicato UGT ha lanzado el informe Población Española en el Exterior, elaborado a partir de los datos del Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero (PERE), y que denuncia la reducción de derechos de este grupo.

Cifras en aumento

Según el citado estudio, hay 2.406.611 personas de nacionalidad española en el extranjero inscritas en el Registro de Matricula consular correspondiente, que aumentaron entre los años 2009 y 2017 en 934.920 personas. Galicia, la Comunidad de Madrid, Cataluña y Andalucía superan las 200.000 personas inscritas en los Registros de Matrícula en el exterior.

El retorno al país de origen y la emigración desde España a un país distinto del de origen, son también causa del aumento de población de nacionalidad española inscrita.

Reivindicaciones de UGT

Con motivo de este informe, UGT recuerda algunas de sus demandas al Gobierno en materia de población española residente en el exterior, especialmente la necesidad de “recuperar el derecho a la asistencia sanitaria en los casos de ausencia del territorio nacional superiores a tres meses”.

Esta medida afecta a quienes, estando desempleados, van a buscar empleo en otros países, especialmente en el ámbito de la Unión Europea. En muchos casos, estas personas no se inscriben en los Registros de Matricula de los países de destino, para evitar esta pérdida. Esta puede ser una de las causas del desfase entre las cifras del PERE y las proporcionadas por los países de residencia.

Facilitar la nacionalidad tras la Ley de Memoria Histórica

Desde el sindicato también se ha reclamado que se facilite el acceso a la nacionalidad española a todos aquellos que no pudieron hacerlo a través de la Ley de Memoria Histórica, cuyo plazo sobre medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura, que permitía el acceso a la nacionalidad de hijos o nietos de españoles de origen, finalizó en el año 2011. Numerosos descendientes de españoles y españolas de origen, no pudieron acceder por finalización del plazo o por no contemplar la ley determinados supuestos.

UGT mantiene también que se debe dotar de un presupuesto adecuado a las políticas destinadas a la población española en el exterior, así como afrontar y resolver la precaria situación, en condiciones de empleo y de Seguridad Social, del personal laboral del servicio exterior.

Por último, el sindicato insiste en un tema que parece que sólo recordamos en época electoral. Facilitar el voto y la participación democrática de los españoles residentes en el extranjero. Empezando por eliminar el voto rogado, agilizar los trámites burocráticos del registro consular y estudiar la implantación del voto electrónico.