Luis Solana, presidente de Telefónica Open Future, nos explica la apuesta de la compañía para fomentar el emprendimiento. Su modelo, abierto a la inversión de otras empresas y de instituciones públicas, busca conectar proyectos innovadores con la inversión. Después de tres años se han creado 10.000 nuevos empleos, 33 espacios de crowdworking en todo el mundo y 445 millones de inversión en más de 720 compañías.
¿Es España un buen país para el emprendimiento y el talento? ¿Está preparada para la revolución digital?
Yo creo que España no ha valorado bastante los cambios de todo tipo que se van a producir en los próximos cinco diez años. Cuando digo España incluyo políticos, gobernantes, empresas privadas, autonomías. Elíjase lo que sea. Es muy difícil encontrar instituciones en este país que no piensen en sus presupuestos y poco más. Nadie piensa que el futuro va a ser nuevo y que cada uno de nosotros, seamos la institución que seamos, el futuro lo vamos a definir nosotros.
¿Qué papel desempeña Telefónica Open Future?
Es un ejemplo, el mejor diría, de cómo una empresa privada sabe que el futuro no lo va a definir ella y quiere colaborar en ello. Lo va a definir gente joven, gente nueva con ideas nuevas, proyectos nuevos y fomentar eso es fomentar el propio futuro de Telefónica.
¿Qué tiene que ofrecer Telefónica frente a gigantes como Apple, Facebook o Google, que por ejemplo con su Campus en Madrid sí parece tener más visibilidad?
Es un problema para nosotros y para todo el mundo. Yo quisiera que este modelo fuera copiado, imitado, colaborado, por toda la sociedad sea sector público o privado. Insisto, si no, no definiremos nosotros nuestro futuro, lo definirán otros.
Telefónica en este momento tiene que tener mucho cuidado de que sus redes no sean un negocio para otros. Eso es un peligro real para nosotros y para todas las empresas de telecomunicaciones. Nos preocupa y por ello contamos con un fondo específico, Telefónica Ventures, destinado a invertir en todos esos emprendedores que tengan algo que permitan que las redes sean más rentables. Todas las empresas de Telecomunicaciones nos jugamos muchísimo
Lo del Campus Google es una verdad a medias o una mentira muy controlada. Cuando Google quiere definir su futuro lo que hace es poner encima de la mesa miles de millones y comprar empresas. No fomentar su emprendimiento, que es lo hace Telefónica, sino comprarlas directamente pagando miles de millones de dólares.
¿Tiene sentido la inversión en I+D+I?
Sí, pero no en una empresa como Telefónica. El ‘Que inventen ellos’ es un viejo aforismo que se hizo como crítica a una España antigua y que tiene mucho sentido ahora. Es un buen eslogan. Son los jóvenes emprendedores los que tienen que inventar. Para nosotros es mucho mejor generar empresas que, además, se puede valorar con suficiencia simplemente midiendo su cuenta de resultados.
El Gobierno de Rajoy se ha instalado en el mensaje de la recuperación ¿desde su perspectiva cree realmente que España va bien?
Las cosas van mejor y lo nota Telefónica que es un buen termómetro. Pero el tema de la revolución digital está mal planteado. El ministerio que tenía que estar definiéndola no es el de Industria sino el de Economía. Quien tiene que marcar las líneas es Luis de Guindos. ¿Qué va a hacer Industria, prestar dinero para ordenadores o desarrollos digitales? Eso es pan para hoy y hambre para mañana. Quien tiene que quitarnos el hambre de mañana es el ministerio de Economía.
¿Hay cortoplacismo en las propuestas de la administración?
Tengo una neutralidad política absoluta, pero que la revelación política en estos momentos sea un partido como Podemos, que lo que hace es buscar soluciones a problemas antiguos, me produce tristeza. Yo quiero que dé soluciones a problemas de mañana. Alguien debería pensar, en Podemos y en todos los partidos, en hacer propuestas para dentro de cinco años.
