Nadie discute que el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, salvó el euro en 2012. También salvó a España, Italia, Irlanda y Portugal con la bajada de los tipos de interés casi a cero y la compra de deuda soberana de estos países (deuda que nadie quería) en contra del criterio alemán. Por esos muchos analistas considera a Draghi y el mayor defensor de la Unión Europea, aunque el suyo no sea un cargo estrictamente político. Ahora ha sido el primer y único cargo relevante de la UE que ha replicado a Donald Trump. Sin exabruptos, pero con firmeza.

En defensa de Europa y Alemania

En su última comparecencia ante el Parlamento Europeo Draghi respondió al 'gurú' económico de Donald Trump, Pete Navarro, quien arremetió contra la Unión Europea y acusó a los países de la Eurozona de devaluar el euro para perjudicar las exportaciones americanas. "Nosotros no manipulamos nuestra moneda", dijo con rotundidad en una clara señal de que el BCE no va a aceptar el argumento simplón de que los problemas de estados Unidos son culpa siempre de enemigos extranjeros que hacen cosas muy malas.

El 'gurú' económico de Trump realizó unas acusaciones muy graves al asegurar que Alemania, con la colaboración del BCE, "manipulan burdamente" a la baja el euro para que las manufacturas germanas sean más competitivas en el mundo. En una de las respuestas a las preguntas de los parlamentarios, Draghi tuvo la habilidad de sacar informes de los propios norteamericanos, concretamente uno de "14 de octubre de 2016 del Congreso de EEUU" en se concluía que "Alemania no está interviniendo unilateralmente en el mercado de divisas".

La respuesta de Draghi debería avergonzar a Pete Navarro porque lo ha dejado a la altura de un ignorante: "el superávit por cuenta corriente alemán ya era del 6% cuando el euro dólar estaba a 1,4. ¿Por qué? Por la fortaleza de la economía alemana", sentenció.

"Muy preocupante"

Además, el Presidente del BCE cargó contra la decisión del nuevo presidente norteamericano de derogar las leyes de Obama para regular Wall Street. No hay economista, por liberal que sea, que no reconozca que la falta de control y regulación del liberalismo salvaje provocó el estallido de las hipotecas subprime, la ruina del sistema financiero y finalmente de la crisis que han sufrido más quienes menos tienen.

Para Draghi es "muy preocupante" que EEUU se esté planteando derogar la Dodd-Frank Act, el corpus aprobado tras la crisis financiera de 2008 para evitar que se repitan algunos de los mismos errores. "Lo último que necesitamos en este momento es una relajación de la regulación. Francamente, no veo ninguna razón para relajar la regulación actual que ha propiciado que la industria bancaria y el sector financiero sean más fuertes que antes"

También abordó una cuestión mucho más técnica y compleja, los acuerdos de Basilea III por los que la UE y los grandes países desarrollados pactaron las bases y requisitos que deben cumplir los bancos para no volver a hundir al mundo en una crisis brutal. Asesores de Trump quiere que Estados Unidos no participe en la "gobernanza global", dentro de su visión ultranacionalista y proteccionista. En este sentido el prresidente del BCE manifestó que "Tenemos que ver qué quiere exactamente la administración norteamericana sobre las negociaciones de Basilea. Pero la combinación de dinero fácil y desregulación financiera es exactamente lo que dio pie al desarrollo de la crisis financiera", ha recordado.