​El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado que es necesario aumentar las rentas de trabajadores y pensionistas tras conocerse la subida de un 3% del IPC. "Es –ha precisado- absolutamente insoportable que tanto los pensionistas como los trabajadores de este país sigan perdiendo poder adquisitivo".

 Álvarez ha realizado estas declaraciones previas a una asamblea de delegados de UGT en Cantabria, donde ha señalado que "no es de recibo que un pensionista empiece el año sabiendo que va a pagar entre 40 y 100 euros más en la factura de la luz y siga perdiendo poder de compra tras el aumento de las pensiones del Gobierno del 0,25%. El Gobierno ha mentido a nuestros mayores y eso se tiene que corregir".

 No habrá acuerdo si no se modifica la revalorización

En este sentido, el secretario general de UGT ha afirmado que "no vamos a llegar a un acuerdo en materia de pensiones con el Gobierno si no se deroga tanto el índice de revalorización como el factor de sostenibilidad de la reforma de las pensiones de 2013, porque no vamos a condenar a los trabajadores a que en diez años pierdan el 20% de poder adquisitivo en las pensiones o que en 2050 pierdan hasta un 40%, como pretende el Gobierno".

Pepe Álvarez también ha exigido que aumente el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta los 1.000 euros a final de la Legislatura. "La subida pactada entre PP y PSOE nos parece absolutamente insuficiente. Deberían haber aumentado el SMI hasta los 800 euros este año y haber realizado un acuerdo para llegar hasta los 1.000 euros al final de este gobierno".

Subida de salarios

Además, ha demandado a la patronal que, con este dato de IPC, "y con el que se conoció en diciembre, está más que demostrado que los salarios deben subir entre un 1,8% y un 3% para que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo".

"Lo que proponen CEOE y Cepyme es absolutamente insuficiente e indignante, ya que condena a los trabajadores a seguir perdiendo poder de compra y a hundirles en la pobreza". Por ello, ha exigido una subida de todas las rentas que compense la pérdida sufrida desde el año 2010, fomente el consumo, la inversión y el empleo estable y consiga aproximarnos a la recuperación real para las familias de nuestro país.