La dimisión se produce después de la polémica por la adjudicación de un contrato a Telefónica Broadcast Services (TBS), dirigida por su hijo Pablo. En concreto de los servicios técnicos del programa de la mañana durante los próximos seis meses y que hasta el pasado mes de junio prestaba la compañía Overon. Según explica el diario Público -propiedad de Mediapro, que tiene participación en Overon-, la decisión no fue comunicada con los 45 días preceptivos que se indicaban en el contrato.

Malestar en el Consejo
RTVE convocó un procedimiento de licitación para adjudicar el servicio al que sólo concurrieron dos empresas, Overon y TBS, a quien finalmente se adjudicó por tratarse de la oferta más barata. Según asegura Público, la adjudicación no fue tratada en el Consejo de Administración, lo que provocó "malestar" en algunos consejeros. "Pueden estar cumplidos todos los requisitos, pero enturbia la imagen transparente de todo proceso", aseguraron las fuentes consultadas, que también destacaron que hay que "advertir" de una adjudicación de estas características. Por ello, algunos consejeros pedirán hoy explicaciones.

Contrato más barato
El contrato con TBS asciende a 1,2 millones de euros (con una duración de seis meses), frente a los 14 millones al año que percibía Overon, aunque en este caso, estaban también incluidos los servicios a otros programas como España Directo.

Candidato de consenso
Oliart sustituyó en el cargo a Luis Fernández. Su nombramiento se produjo 24 de noviembre de 2009 tras el acuerdo alcanzado por los grupos parlamentarios socialista y popular en una negociación en la que intervinieron directamente el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy. Ambos partidos incidieron entonces en la necesidad de que al frente de esta Corporación se situara una persona de consenso para garantizar la independencia y pluralidad de RTVE.

Orgulloso del puesto
Oliart ha enviado al Congreso una carta en la que anuncia su decisión. El hasta ahora presidente de RTVE asegura sentirse "orgulloso de haber dirigido a unos profesionales de extraordinaria valía, merecedores de mi respeto, admiración y agradecimiento”, que le han facilitado el trabajo para conseguir “una radio, una televisión y una web públicas plurales e independientes”. Subraya asimismo que para él fue “un honor” ser designado para ese cargo “por amplia mayoría de los señores diputados y sin ningún voto en contra".