La desaparición y posterior asesinato de Gabriel ha vuelto a reabrir el debate sobre el papel que juegan los medios de comunicación en este tipo de casos y las informaciones que se publican sobre sucesos tan desafortunados como la violación perpetrada por ‘La Manada’ en Pamplona, el supuesto acoso sexual a un menor en una escuela de Jaén o el asesinato de Diana Quer a manos de un desalmado en Galicia.

Controversia que tristemente ha estado muy presente en las últimas semanas a raíz del comportamiento que diversas empresas informativas han mantenido ante estas informaciones, sobrepasando en muchos casos todos los límites de la deontología profesional a sabiendas del daño que se puede infligir a las familias de las víctimas.

Reproches de la madre de Gabriel
Prueba de ello es que tan sólo dos días después del entierro de Gabriel, la madre del menor, Patricia Ramírez, rompía su silencio para entrar por teléfono en ‘El Programa de Ana Rosa’ con el objetivo de aclarar que el periodista Manuel Vilaseró, sentado ese día en la mesa del programa que emite Telecinco, no era amigo de la familia.

"No dudo de sus buenas intenciones, pero se está presentando como amigo nuestro cuando no lo es", afirmó Patricia Ramírez.

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Juan Carlos Quer atiende a los medios de comunicación. EFE. 

El cadáver de Diana y otros excesos intolerables

No era la primera ocasión en la que un familiar directo de una víctima reprochaba a algún periodista, medio de comunicación en concreto, o prensa en general, la cobertura realizada del suceso. De hecho, nada más comenzar este año, Juan Carlos Quer se vio obligado a pedir a los medios de comunicación que huyeran del sensacionalismo en las informaciones sobre su hija. Antes, ya  había expresado su malestar por la difusión de imágenes del cadáver de Diana.

“Han aparecido ya en los medios de comunicación fotografías e imágenes del cadáver de mi hija Diana cubierto con una sábana. ¿Era necesario? La pregunta se responde por sí sola. ¿Hubiera publicado el director de ese medio esa misma fotografía si se tratase de su hija”, preguntó el padre de Diana Quer.

Lo más dramático es que la publicación de esas fotografías es que no fue el exceso más brutal que algunos medios cometieron al tratar el asunto.

Programas como ‘Espejo Público’ (Antena 3) tuvieron que entonar un mea culpa por el tratamiento que realizaron del asesinato de Quer. Y es que sus ropa, sus relaciones y sus publicaciones en redes sirvieron de excusa a las televisiones para culpar a la joven de su propia desaparición.

De Inda a Ana Rosa, pasando por ‘El Mundo’, este periódico realizó en su día un repaso las noticias más desafortunadas sobre Diana Quer con el objetivo de que no se volviesen  a repetir las terribles equivocaciones en sucesos similares. Pero de nada sirvió.

Vuelta a las andadas en Jaén
Tras Diana Quer, llegó la violación en Jaén y buena parte de la prensa volvió a las andadas. Tanto es así que instituciones como la Junta de Andalucía, el Defensor del Pueblo y del Menor se vieron obligados a realizar un llamamiento a la prudencia y responsabilidad de los medios de comunicación ante la gran presión que se estaba ejerciendo sobre los menores implicados en el caso de la presunta violación de Jaén y sus familias.

El Gobierno andaluz fue el más activo a la hora de reclamar "cautela y respeto" para garantizar la protección e intimidad de los menores, tanto de la presunta víctima, un niño de 9 años, como de los supuestos agresores, cuatro compañeros de entre 12 y 14 años de un colegio de la comarca de Cazorla.

"Entiendo que hay que informar y es importante que haya transparencia, pero depende de cómo se trate una noticia el impacto sobre la familia será uno u otro, y hoy esta familia se siente mal", indicó la presidenta de Andalucía, Susana Díaz.

Periodismo basura: el caso de Trece
“Desde los medios de comunicación no se debe contribuir a torturar más a alguien que ha sufrido algo tan grave y tan violento, como puede ser una violación, por lo que además de respetar la presunción de inocencia , también hay que hacer lo propio con la integridad de la víctima”, explicó a ELPLURAL.COM Francisco Zurián, profesor de la facultad de periodismo de la Universidad Complutense de Madrid, a raíz del tratamiento del caso de 'La Manada', en el que algunos medios llegaron a culpar a la víctima en lugar de a los supuestos agresores.

Sin duda, en el tratamiento de este suceso, nadie llegó tan lejos como Trece, la cadena de los obispos que a través de su programa 'Detrás de la Verdad' emitió fragmentos de los 7 vídeos grabados por la Manada de la supuesta violación perpetrada a una joven, ofreciendo otra buena dosis de periodismo basura.