Cuatro veces ya no es una rareza, aunque si se echa la vista atrás hacia los 40 años de historia de Interviú, sí es histórico ver a un hombre posando desnudo en su portada. De media, algo que sólo ocurre una vez cada década. Y esta vez le ha tocado a Pelayo Díaz, el estilista del programa Cámbiame, que considera el posado “una liberación, estoy orgulloso del hombre que soy”.
De hecho, posar en Interviú era el sueño de Pelayo, según revela en la entrevista interior. “Siempre pensé que, si me ofrecían un desnudo, me inspiraría en el mundo beefcake”, señala, y añade que “hoy, gracias a Dios, no tenemos que esconder nuestra orientación sexual, ni nuestros gustos, ni pensamientos”.
Pelayo cuenta cómo fue saber que era homosexual en un entorno que no lo aprobaba: “Estudié 14 años en un colegio de monjas y hubo una época en que luché contra ello, pensaba que era algo pasajero. De repente, veía una chica que me gustaba y eso me aliviaba… pero luego me daba cuenta de que me gustaba porque corría como yo. Lo pasé fatal porque no tenía a nadie con quien hablar”.
El desnudo no sólo es reivindicativo, sino que ayudará en la efeméride de esta semana, el Día Mundial de la Lucha Contra el Sida: “Llevo años apoyando con mi presencia la gala de la Lucha Contra el Sida y concienciando en las redes sociales. He querido donar el dinero a la Fundación del doctor Bonaventura Clotet, una de las eminencias en la lucha contra el sida. Cuando tenía 22 años tuve un novio con VIH y fue un golpe de cruda realidad”.
Aunque también sirve como homenaje a dos personas importantes que Pelayo ha perdido en su vida en este 2017: Bimba Bosé y David Delfín. “A Bimba siempre le estaré agradecido porque ella fue quien me presentó a David. Siempre la amaré porque gracias a eso viví los años más felices de mi vida. Él siempre tuvo un concepto maravilloso de la vida, sin prejuicios, libre, divertido… y veía Interviú como algo que le apetecía hacer”, señala.
El de Pelayo es el cuarto posado masculino de la revista en 40 años de historia. El primero lo protagonizó Jesús Vázquez, en el año 2010. El éxito agotó todas las revistas en los kioskos de España y hubo que hacer una segunda edición. Incluso la web de la revista se colapsó.
Unos meses después, le llegó el turno a Rafael Amargo. La revista lo presentó como “un desnudo en el mar, con arte y garra flamenca”. “Soy políticamente incorrecto y emocionalmente promiscuo”, declaró el bailaor.
Y tres años hubo que esperar para ver el siguiente posado de un hombre, que protagonizó el jinete Álvaro Escassi, que explicó su éxito en el amor así: “Mi secreto con las mujeres es que soy muy pesado. Siempre he ligado yo, nunca me han ligado”.
