El fiscal jefe de Cataluña, Martín Rodríguez Sol, durante una entrevista mantenida con Efe. EFE/Archivo El fiscal jefe de Cataluña, Martín Rodríguez Sol, durante una entrevista mantenida con Efe. EFE/Archivo



Era una destitución anunciada, porque vista la presión desde los medios de la derecha era difícil que Martín Rodríguez Sol, fiscal superior de Cataluña, no pagara caro sus declaraciones, el pasado domingo, a favor del derecho a decidir de los catalanes. El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha firmado ya el decreto para cesarle, a pesar de que ayer Rodríguez Sol aclaró que una cosa defender la consulta y otra muy distinta respaldar “un proceso secesionista”, que él no apoya.

Las declaraciones de Rodríguez Sol
El pasado domingo, Rodríguez Sol, en unas declaraciones a Europa Press, afirmó que es legítimo “darle la posibilidad al pueblo de expresar lo que quiere”, como es, en su opinión, el caso de una consulta soberanista. El fiscal superior de Cataluña reconoció, no obstante, que “no existe un marco legal que permita un referendo sobre independencia” y defendió la posibilidad de modificar la Constitución.

La postura del fiscal sobre las acusaciones contra Convergència
No es la primera vez que Rodríguez Sol se posiciona frente a Torres-Dulce en temas espinosos. En noviembre pasado, decidió abrir diligencias de investigación por la denuncia presentada por la Generalitat por presuntas calumnias contra el diario 'El Mundo', por las informaciones publicadas por ese diario sobre presuntas cuentas en Suiza de los máximos dirigentes de Convergència, incluido Artur Mas. Entonces, Torres-Dulce le limitó a desautorizarle y dijo que no compartía ni el fondo ni las formas de su actuación, especialmente que no le hubiera informado previamente. En esta ocasión, la presión mediática ha podido ser determinante.

Presiones de los medios de la derecha
Este lunes, la sentencia llegó desde los medios de la derecha, que pedían la destitución fulminante de Rodríguez Sol en sus editoriales. La Razón hablaba de “destitución obligada”, ABC ponía su aportación a la causa con el titular “Cuando la Fiscalía va contra la Ley”, mientras El Mundo también dejaba claro lo que pensaba sobre el fiscal superior de Cataluña: “La inadmisible consulta de un fiscal con más ambición que vergüenza”.

El PP pide "neutralidad"... cuando le conviene
Por el PP, el portavoz adjunto en el Congreso, Rafael Hernando, fue el encargado de manifestar la postura de su partido, junto con la líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. Según dijeron ambos, en peculiar coincidencia una persona con el cargo de Rodríguez Sol “debe permanecer neutral”. Suele suceder que cuando al PP le viene bien exige neutralidad y cuando no, hace la vista gorda. No se oyeron voces populares contra el expresidente del Tribunal Supremo Francisco José Hernando, cuando para mostrar su opinión contraria a que el catalán fuera un requisito para ejercer la carrera judicial menospreció la lengua al afirmar que aprenderla forma parte del “enriquecimiento personal, como cuando voy a Andalucía me gustaría bailar sevillanas” y que “no se debe imponer el conocimiento de una lengua que luego no tiene una proyección positiva en otros aspectos de la vida".

La derecha mediática, satisfecha
Hoy la derecha mediática, satisfecha, aplaude a Torres-Dulce. En La Razón se justifica que su decisión “responde a la gravedad de los hechos atribuidos al expedientado”, porque “no es aceptable que un funcionario que tiene por principal labor la defensa de las leyes se pronuncie a favor de unas posiciones contrarias a la Constitución (…) Al fiscal general del Estado le asiste toda la razón”.

ABC, como La Razón, repite hoy editorial sobre este asunto, bajo el titular: “El fiscal que hablaba demasiado”. Para el decano de la derecha mediática española, “Rodríguez Sol es, por desgracia, un ejemplo más de abducción por el régimen del nacionalismo catalán, con esas tendencias totalitarias de toda ideología nacionalista, que hacen que personas e instituciones sucumban al mimetismo con el discurso imperante. Da igual que haya sido por frivolidad o debilidad; el comportamiento de Rodríguez Sol es inaceptable”. El Mundo también da un espaldarazo al fiscal general del Estado, que, según afirma, “ataja el desafío soberanista del fiscal catalán”. Para el diario de Pedro J. Ramírez, “la deslealtad de Sol justifica su destitución”.