Es significativa la gran desmovilización del electorado socialista, entre el que se ha instalado el derrotismo, según este sondeo. El 82% piensa que el PP ganará y solo el 63% de ellos declaran preferir que sea su partido el que gane el 20-N.

15 diputados
El PSC ganaría en las elecciones de noviembre y obtendría 15 diputados, un resultado muy distante de los 25 escaños conseguidos en 2008. Le seguirá Convergència i Unió (CiU), con 14, y el PP, con 13. El PP ganaría a CiU en votos, aunque no en escaños.

Votos a la abstención
La mayor parte del trasvase de voto socialista irá a la abstención, y se estima una participación de hasta ocho puntos inferior a la de hace cuatro años. Según el sondeo, el 8,2% de los votantes socialistas darían su voto esta vez al PP; seis de cada cien votaría a CiU; y el 42% volvería a confiar en el PSC. Un 35% manifiesta dudas sobre acudirá a las urnas o se abstendrá.

Rubalcaba mantiene la confianza de los votantes del PSC
En cuanto al candidato socialista, en cambio, los votantes de ese partido en Cataluña mantienen una buena opinión y le conceden un aprobado de 5,2 puntos. Le seguiría Mariano Rajoy, un punto por debajo.

PP, 13 diputados; CiU, 14
Tras el PSC, en la segunda posición se augura una apretada lidia entre populares y nacionalistas. Cataluña contribuiría a la hipotética mayoría absoluta del PP con 13 diputados, mientras CiU aumentaría su representación parlamentaria, con un total de 14 escaños, cuatro más que en 2008.

El anterior sondeo de ABC
La sangría de votos del PSC recogida en esta encuesta coincide con los resultados del sondeo de ABC, sobre el que informó ELPLURAL.COM, que reflejó una pérdida de 10 puntos en intención de votos para los socialistas, que conseguirían, de acuerdo con esa consulta entre 18 y 19 diputados, con el 36,7% de las papeletas.