Juan Rosell, presidente de la patronal CEOE
El próximo miércoles 17 de diciembre los empresarios están llamados a las urnas para elegir a la persona que deberá presidir la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) hasta el año 2018. El Gobierno de España, los partidos constitucionalistas, y los actores sociales que claman por “una tercera vía” que pueda poner fin a las desavenencias entre Cataluña y el estado español consideran “clave” la reelección de Juan Rosell al frente de la patronal.
La “cuestión catalana”
Todo ello a pesar de que el adversario de Juan Rosell para presidir la CEOE, Antonio Garamendi, ha utilizado la “cuestión catalana” con el objetivo de ampliar sus apoyos. Lo ha hecho, aún a riesgo de perjudicial el protagonismo que en el futuro podría jugar la patronal a la hora de estrechar lazos de unión entre Cataluña y España.
“Con prudencia y discreción”
Y es que los principales actores políticos en España y Cataluña ponen de relieve la defensa que Juan Rosell ha realizado en todo este tiempo del mercado único, trabajado intensamente por el diálogo, la negociación y el pacto entre ambas administraciones. “Una tarea -resaltan fuentes gubernamentales-, que la ha realizado con prudencia y discreción; ganándose la confianza del Gobierno de España y sin levantar rechazo en el Gobierno de Cataluña”.
La unidad de España
Como ejemplo, valoran la propuesta que discretamente Rosell presentó a Mariano Rajoy a finales de verano en el Palacio de la Moncloa encaminada a evitar el choque de trenes entre Cataluña y España. Los partidos políticos constitucionalistas son conscientes de que la función principal del empresariado es generar riqueza y empleo, pero al mismo tiempo consideran imprescindible su ayuda para generar la estabilidad política necesaria que ayude a superar la crisis.
“Arrimar el hombro”
De ahí que hayan sentido “desasosiego” al comprobar como Garamendi ponía públicamente en duda la labor realizada por Rosell en esta materia y cuestionaba el papel que la CEOE había jugado ante la consulta ciudadana celebrada el pasado 9 de noviembre en Cataluña. Una opinión que también es compartida por la mayoría de los empresarios: “Necesitamos tranquilidad y estabilidad política, y no un candidato a presidir la CEOE que, como Antonio Garamendi, se sirva de la cuestión catalana para intentar arañar un puñado de votos. Hay que arrimar el hombro para buscar soluciones al conflicto, y no limitarse a hacer un discurso fácil y españolista que en la práctica no sirva para nada”, afirma a ELPLURAL.COM una persona muy bien relacionada en el ámbito empresarial.
Apoyo de Madrid, Aragón, Extremadura…
De hecho, hay quien públicamente ha salido en defensa del papel que Rosell ha realizado a la hora de tender puentes entre Cataluña y el Gobierno central. Sin ir más lejos, José Antonio Segurado, el presidente de honor-fundador de la patronal madrileña y miembro de la junta directiva y del comité ejecutivo de CEOE, ha asegurado en una entrevista concedida al diario ABC que “Rosell ha defendido la unidad política y económica, con la unidad de mercado de España, igual que lo ha hecho el reelegido presidente de Fomento, Joaquin Gay”.
Temor de los empresarios vascos
El intento de presentar a Rosell como un independentista también se desmonta si se tiene en cuenta que mayoritariamente los empresarios de Madrid, Extremadura, o Aragón -entre muchas otras comunidades-, ya han anunciado su intención de votar al empresario catalán. Dentro de estas patronales algunos empresarios sospechan que las criticas de Garamendi a Rosell sobre su supuesta tibieza en el conflicto catalán guardan relación con el temor de muchos empresarios vascos a que el Gobierno central y catalán opten por solucionar el conflicto a través de un “pacto fiscal” o “cupo catalán” que en la práctica suponga el fin de la exclusividad que en esta materia goza el País Vasco y Navarra.
