El juez Pablo Llanera ha decretado libertad sin medidas cautelares para Artur Mas, tras su declaración, esta mañana,  ante el Tribunal Supremo en la investigación por un posible delito de rebelión en el proceso soberanista que llevó a la declaración unilateral de independencia (DUI).

En declaraciones a los medios, tras su declaración, Mas ha explicado que ha negado ante el juez que hubiera "un comité estratégico" en el proceso independentista. "Se nos convocaba a reuniones informales donde se hablaba de política", ha precisado antes de afirmar que eso es lo que "hacemos los políticos, hablar de política", para cumplir los "mandatos electorales".

Mas ha dicho que está "satisfecho de quedar en libertad", pero "muy triste por la situación de prisión de determinadas personas y de otras que están fuera del país y no pueden regresar". Esa "tristeza", ha añadido, "no me permite celebrar" la libertad.

El expresident llegó a primera hora al Tribunal Supremo entre aplausos de decenas de soberanistas  y gritos de "traidor" y "prisión" por parte de un grupo de miembros de Falange.







La investigación
La investigación sitúa a Mas entre los integrantes del comité estratégico que dirigió las acciones contempladas en la hoja de ruta del "procés", dibujada en el documento Enfocats, y le ubica en reuniones clave para la preparación del referéndum independentista.

Su nombre aparece en la libreta de Josep María Jové, número dos de Oriol Junqueras y pieza clave del proceso soberanista considerado el "cerebro" de la logística del 1-O, en varias reuniones en las que se trató este asunto.

Pero, según esos apuntes, en verano de 2016, Artur Mas se opuso a impulsar al referéndum unilateral, convencido de que "el Estado sabía como cargárselo", y criticó que la CUP hubiera forzado el cambio de los planes iniciales y exigiera celebrar el referéndum, que finalmente fue fijado para el 1-O.

Incluso llegó a advertir de forma indirecta de la posible aplicación del artículo 155 de la Constitución, según el último informe que la Guardia Civil ha remitido al juez Llarena, en el que deja constancia de las "enormes disensiones" internas que se produjeron en Junts pel Si en los preparativos del referéndum.

Mas fue condenado en marzo del pasado año a dos años de inhabilitación por desobedecer al Constitucional al convocar la consulta del 9 de noviembre de 2014. El Tribunal de Cuentas investiga su responsabilidad en el desvío de fondos para ese fin, por lo que ha ordenado el embargo provisional de sus inmuebles para hacer frente a una fianza de 5,2 millones de euros.

Artur Mas está citado a las nueve de la mañana y dos horas después debe comparecer Neus Lloveras, expresidenta de la Associació de Municipis per la Independència (AMI), también considerada integrante del comité estratégico del "procés".

El juez ha citado a ambos en una segunda ronda de declaraciones en la que ya ha tomado declaración a la exdiputada de la CUP Mireia Boya y, ayer, a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y la coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal. Las tres quedaron en libertad (Rovira bajo fianza de 60.000 euros), tras ofrecer al juez testimonios discrepantes sobre la importancia de la DUI. A juicio de Boya, tenía valor real y no "cosmético"; para Rovira y Pascal no tenía ningún valor jurídico.

También está citada este miércoles Anna Gabriel, exdiputada de la CUP, si bien ya ha anunciado que no acudirá a la cita, convirtiéndose en la sexta fugada del procés.