La esperada entrevista de Jordi Évole al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha dejado muchos titulares, pero un momento muy comentado tanto en medios como en redes sociales y que, a lo largo de este lunes, se le ha vuelto en alguna crítica al periodista de Salvados.

Durante la entrevista, Évole le recordó a Puigdemont que en 2014 su partido, por entonces Convegencia i Unió (CiU), votó en contra de apoyar una moción en el Parlament por el derecho de autodeterminación de Kurdistán, cuyo referéndum se ha celebrado este lunes.

Aunque la pregunta ha quedado como el momento estrella de la entrevista, la cosa no era tan simple. Es verdad que el partido de Puigdemont, acérrimo ahora y entonces del independentismo catalán, votó en contra del referéndum kurdo, pero lo hizo porque no se aceptaron sus enmiendas que, entre otras cosas, recogían hacer extensible la moción al “reconocimiento del derecho de autodeterminación de los pueblos”.

La moción debatida, presentada por ICV, hablaba en general de “la política de acción exterior del Govern”, pidiendo apoyar desde la Generalitat los derechos de autodeterminación de Palestina, Kurdistán y Sáhara Occidental.

Una “trampa”

Desde el PDeCAT, su diputado nacional Ferran Bel ha criticado a Évole por querer “hacerle la trampa al presidente” y de hacerle una pregunta sin contexto como “un truco muy fácil”.

“Convergència propuso diferentes enmiendas para que se reconociera el derecho a decidir de los diferentes pueblos del mundo y no se admitió”, “no se votó porque no se admitieron las enmiendas”, ha recordado Bel en una entrevista en Al Rojo Vivo.

Recordando la prensa de hace tres años, la verdad es que ese día de produjo una votación enrevesada en el Parlament. CiU y PP votaron en contra de toda la proposición no de ley, cada uno con sus enmiendas; el PSC se abstuvo en el caso kurdo pero pidieron una Palestina y un Sáhara libres mientras que Ciudadanos rechazó la autodeterminación palestina y kurda pero avaló la celebración de un referéndum “libre y vinculante para decidir el futuro del Sáhara Occidental”.