Jordi Sànchez ha enviado una carta al grupo parlamentario de JxCat en la que se vuelve a proponer como candidato a presidir la Generalitat, tras la renuncia de Jordi Turull, que también ha enviado una carta, en este caso, al Parlament, en la que renuncia de forma provisional a su candidatura.

Sànchez, encarcelado en Soto del Real por rebelión por orden del Tribunal Supremo, ya fue propuesto candidato a presidente de la Generalitat, pero el pleno de investidura se anuló cuando el juez Pablo Llarena no concedió permiso a Sànchez para asistir al pleno. Posteriormente, Sànchez manifestó ante el juez Llarena que abandonaría toda actividad política y volvería a dar clases a la universidad. Pero, tras este anuncio, S`sanchez no renunció a su acta de diputado y ahora se autopropone como candidato.

La estrategia de Junts per Catalunya es proponer ahora de nuevo a Sànchez basándose en un informe del comité de derechos humanos de las Naciones Unidas en el que se recomienda al Estado que facilite los derechos políticos a Sànchez. En su carta, Sànchez, asegura que está "totalmente de acuerdo con la estrategia y con las consecuencias que supone" y añade que "como todos los diputados de Junts per Catalunya, estoy al servicio de la estrategia colectiva, y si esta es la voluntad del grupo, estaré ahí con todas mis energías".

Finaliza su misiva comunicando su "plena disposición a afrontar el debate de investidura, si así la considera oportuno la mayoría del grupo parlamentario".

Los independentistas desean una nueva investidura fallida para, después, proponer ya a la persona que será elegida de forma efectiva. Con esta propuesta se promueve la manifestación convocada por las asociaciones independentistas para el próximo de 15 de abril en Barcelona como presión a las instituciones europeas.