Los contactos de alto nivel de los que habló el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, empiezan a concretarse. Según avanza La Vanguardia, Mariano Rajoy y Carles Puigdemont almorzaron juntos el pasado 11 de enero en la Moncloa, al día siguiente de que Soraya Sáenz de Santamaría se reuniera en Barcelona con Oriol Junqueras. Mariano Rajoy ha venido a confirmarlo en los pasillos del Congreso cuando, al ser preguntado al respecto, ha dicho que su postura sobre Cataluña es la misma de siempre.
La esperada reunión, sin embargo, no sirvió más que para que ambas partes se ratificaran en sus posturas: Puigdemont insistió en el referéndum y Rajoy en no permitirlo. El almuerzo en la Moncloa se produjo un día después de que Santamaría se reuniera en Barcelona con Junqueras
Pese a la contundencia con que el presidente del PP catalán, Xavier García Albiol o la consellera Neus Munté desmintieron tales contactos tras las palabras de Millo, cada vez es más evidente que sí se han producido. Por ejemplo, el líder del PSC, Miquel Iceta, reconocía en una conferencia en el Club Siglo XXI de Madrid que el encuentro entre los dos presidentes se había producido aunque sólo había servido para constatar la “lejanía” de las posiciones entre ambos.
Ambas partes acordaron mantener la discreción sobre su encuentro que, al final, se ha convertido en un secreto a voces.
Por su parte, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha negado durante la sesión de Control al Congreso, a instancias del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, la existencia de "reuniones secretas" con ningún Gobierno autonómico. Según Catalá, "todo es transparente".Tampoco el vicesecretario y coordinador general del PP, Fernado Martínez-Maíllo se ha avenido a ratificar el encuentro entre Puigdemont y Rajoy. "No tengo ningún dato", ha dicho, "ni para confirmar ni para desmentir".
