Antoni Comín ya ha ejercido su derecho de voto, por tres veces, después de que la mayoría independentista en la Mesa del Parlament rechazara las reconsideraciones presentadas por Ciutadans, PP y PSC. Con esta acción, JxCat y ERC se aseguran 66 votos en la Cámara, lo cual los permitiría investir a un presidente de la Generalitat por mayoría simple, siempre y cuando la CUP se abstenga. El resto de formaciones suman 65 escaños.

Ante la decisión de Mesa, Ciutadans, a través de su líder a Cataliunya, Inés Arrimadas, ha anunciado que llevará la delegación del voto ante el Tribunal Constitucional. Horas después, Xavier Garcia Albiol también ha dicho que estudia hacerlo.

De momento, el Gobierno español no se ha opuesto a la delegación de voto de Puigdemont, que Ciutadans también puso el grito al cielo, pero que no activó ningún mecanismo para evitarlo. En en cuanto a Comín, el presidente español, Mariano Rajoy, dijo este martes que estudiarían acciones legales, pero fuentes de La Moncloa puntualizaron que lo dejaban en manos del PPC en el Parlament. De este modo, la delegación del voto de Comín no quedaría suspendida automáticamente.

Un pleno de trámite

El pleno del Parlamento de hoy miércoles ha sido de trámite y ha servido para validar las cuentas del presupuesto de la misma Cámara, que han sido aprobados sólo con la abstención de la CUP, que se ha quejado de los sueldos.

Así mismo, el Parlamento ha avalado por unanimidad el decreto que convalida la recuperación de la paga extra de los funcionarios de la Generalitat de 2012. Aunque se tenía que votar el pasado 5 de abril, los grupos independentistas pidieron su suspensión hasta tener un informe jurídico para averiguar si Soraya Sáenz de Santamaría, o un representante del Gobierno, tenía que defender ante el pleno esta opción. 

Este recorte de sueldos a los trabajadores públicos fue una de las medidas tomadas por Artur Mas, con Elsa Artadi de asesora, para hacer frente a la crisis económica el 2012. El acuerdo final para la recuperación de esta paga se hizo a principios de 2016, pero la Generalitat de Artur Mas y de Carles Puigdemont no firmaron nunca el decreto. Si no se aprobaba antes del 26 de abril, los trabajadores de la Generalitat habrían perdido sus derechos económicos. Además, ha sido la secretaría de Función Pública de la Generalitat quién ha preparado la documentación que ha firmado la vicepresidenta en virtud de la aplicación del artículo 155.

Presidente a distancia?

Ante un pleno de trámite y sin actividad política, hoy se ha conocido que el próximo jueves 3 de mayo el Pleno del Parlament debatirá, casi seguro, la modificación de la Ley de Presidencia, instada por JxCat, la cual permitiría la elección de un presidente vía telemática. Aunque se apruebe, hará falta su publicación en el Diario Oficial de la Generalitat y en el BOE y que el Gobierno de Rajoy no la impugne.

Varias fuentes independentistas ven ya la salida del túnel y que antes del 20 de mayo Cataluña pueda tener un presidente "efectivo" elegido por el Parlamento. No obstante, otras fuentes señalan que el camino es ir a unas nuevas elecciones.