Y es que este presidente del Gobierno, aunque cree que es un buen político, no lo es. Castigado a raudales por José María Aznar, tras haberlo llevado hasta el cielo, lo ha dejado después en pelota picada. Todo ello tuvo que aguantarlo. De modo, que Rajoy Brey se debe encontrar ahora temblando porque su fiesta ya no es lo que era.

Y resulta que ahora le están pareciendo simpáticos los de Podemos; mejor dicho los podemitas catalanes de En Comú Podem. Al menos, los mira con buenos ojos y cree importante que Ciudadanos se les aproxime para lograr suficientes votos en el Parlament, en un intento de evitar así que el nuevo president sea independentista. En ese contexto, el voto de los cuatro diputados del PP sería decisivo, así como que se concrete la situación de los ocho diputados independentistas, huidos o encarcelados, a la hora de la investidura del nuevo President.

Este presidente del Gobierno, aunque cree que es un buen político, no lo es

El coordinador nacional del PP, Fernando Martínez Maillo, está animando a Inés Arrimadas, de C’s, a que tome la iniciativa porque tiene opciones numéricas de llegar a acuerdos si se aproxima a los comunes, a fin de lograr una nueva mayoría en el Parlament.

Olvidadas toda una serie de frases, que ahora sonarían desafortunadas a Rajoy Brey y sus palmeros. Por ejemplo, “Podemos se presentan como don Limpio, pero en cuanto le pasas el algodón éste queda cubierto de suciedad, por no decir de caca.” Este fue el sublime concepto que lanzó el diputado Rafael Hernando en su estreno como portavoz del PP en el Congreso de los Diputados.

El partido en el Gobierno ha sido pródigo en esas críticas por las que ahora pueden estar dándose cabezazos contra la pared. Y la cosas se complican más si se trata de Venezuela: “Podemos es un partido populista de extrema izquierda, cuyo modelo es Venezuela”, arengaba la hoy ministra de Defensa, añadiendo que eso era “muy peligroso para el sistema, para la democracia y para todo lo que hemos conseguido en este país.”

Claro que Esperanza Aguirre, popular donde las haya, no se ha quedado corta: “A los de Podemos les gusta que haya presos políticos…” refiriéndose al mismo tema estrella venezolano. Y ante un hipotético triunfo electoral de la coalición de Pablo Iglesias, la ex lideresa del PP auguraba: “Será la última vez que votemos libremente, con justicia independiente, medios plurales y habeas corpus”. ¡Toma ya!

Es que hay que tener cuidado con lo que se habla, porque luego se revuelve contra del que lo ha dicho, y pasa lo que pasa. Si no, atención a esta última joya: “No podemos jugar el futuro de nuestros hijos a la ruleta rusa de la frivolidad, la incompetencia y el populismo. No podemos”. ¿Adivinan quien lo decía? Pues sí, él, Don Mariano, con penetrante visión de futuro. A ver como lo arregla ahora.