El Parque Nacional del Archipiélago de Cabrera es uno de los mejores ecosistemas insulares del Mediterráneo español.  Su garriga, rica en endemismos,  es punto de escala  en la ruta migratoria de más de 150 especies de aves. Sus fondos marinos albergan más de 200 especies de peces,  son ricos en  invertebrados autóctonos y están  resguardados  por unas aguas  que combinan azules y verdes de gran transparencia. A pesar de todo ello, aparecen nubarrones sobre el futuro del parque dado de la ampliación de su extensión se encalla. Todo apunta a presiones políticas.

En el 2015 el Gobierno balear solicitó al ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente la ampliación de los límites marítimos del Parque, con buena acogida de los  sectores implicados y del  propio ministerio. El 2016 se creó una comisión bilateral entre el ejecutivo autonómico y el organismo Parques Nacionales para extender los límites. La ministra mostró su apoyo a la ampliación, tanto en las Cortes Generales como en foros o conferencias internacionales. Los  grupos parlamentarios de las Cámaras alta y baja consensuaron iniciativas como la que, inspirada por la entidad ecologista Océana,  fue aprobada por unanimidad el 11 de julio de 2017  en el  Senado con el fin de ampliar la red de Parques Nacionales marítimos,  entre ellos el de Cabrera.

Lo cierto es que todo andaba a buen ritmo hasta que en el último trimestre todo se estancó a pesar de que el Gobierno balear contaba con una propuesta muy  participada por los sectores y por el propio organismo Parques Nacionales. La ampliación fue consensuada en el Patronato del Parque, incluso por el representante de la Federación de Cofradías de Pescadores de Baleares, que eran quienes podían resultar más afectados. El propio Patronato se dirigió a la ministra en noviembre del año pasado pidiéndole explicaciones respecto de la paralización y a día de hoy no ha recibido respuesta.

Las últimas noticias, nos sitúan en una entrevista del consejero de Medio Ambiente de Balears con la Secretaria de Estado, en la que ésta afirma que no se bloqueará la ampliación, pero no aporta  certezas  sobre  cuándo se reanudará el proceso para hacerla efectiva. Un proceso sobre el que planea, según algunas fuentes, la oposición de parte del sector de la pesca profesional de la Península; otras, en cambio, ubican la obstrucción en parajes más cercanos y de origen más “Popular”.

El Grupo socialista ha solicitado la comparecencia en el Senado de la ministra para que informe de los motivos de tal parálisis y aclare el enredo cuanto antes. No es para menos, hablamos de la protección de una zona de gran riqueza natural, de avanzar en el cumplimiento de los objetivos europeos para una mejor conservación de los mares, y de dar apoyo a una iniciativa avalada por los expertos y por el Patronato del Parque, además de tutelada por el Gobierno de Balears y por los departamentos del Estado que entienden de ello.