Este escándalo afecta directamente a la Vicepresidencia del Govern, que ostenta Biel Barceló; la conselleria de Transparencia y Cultura, de Ruth Mateu; la conselleria  de Medio Ambiente, de Vicenç Vidal y la Regiduria de Urbanismo que gestiona el futuro alcalde Palma, Antoni Noguera.

Esta información que destapo el pasado domingo en Diario de Mallorca, confirma que todos estos organismos públicos han adjudicado “a dedo”  un total de 6 contratos al que fue jefe de campaña de Biel Barceló, las pasadas elecciones, lo que provocado un profundo malestar entre sus socios de Pacto.

Todas estas adjudicaciones se han realizado mediante contratos menores, una fórmula que permite la administración pública adjudicar “a dedo” a una empresa trabajos que no sobrepasen los 18.000 euros.

Las dos empresas del que fuera Jefe de Campaña de Biel Barceló, han realizado concretamente un informe sobre el tejido empresarial por valor de 55.660 euros y la Agencia de Turismo Balear (ATB) lo contrato para realizar  el Barómetro de Satisfacción Turística. La  conselleria de Transparencia y Cultura contrató con Garau un informe para para analizar el impacto económico de las actividades culturales y un estudio de público de la Orquesta Sinfónica de Balears, mientras que la conselleria de Medio Ambiente le concedió una asistencia técnica sobre el Plan de Desarrollo Rural.

El caso de la concejalía de Urbanismo y Modelo de Ciudad del Ayuntamiento de Palma que ostenta el futuro alcalde Palma, Antoni Noguera , encargó a esta empresa la elaboración del plan estratégico y la memoria del Proyecto del Litoral de Ponent para su presentación a la convocatoria del programa operativo de crecimiento sostenible incluido en los fondos FEDER de la Unión Europea, un proyecto presentado que ha sido seleccionado por la Unión Europea con la posibilidad de invertir en los próximos años hasta 25 millones de euros en la mejora de las barriadas del litoral de Palma.

Esta noticia ha provoca un auténtico torbellino de críticas entre los militantes de Més, y entre sus socios de gobierno Podemos y PSOE, que califican estas prácticas de “falta de ética”, mientras que voces del partido nacionalista defienden la completa legalidad de los contratos sus propias bases les echan en cara que en pasadas legislaturas Més ha denunciado cientos de veces las contrataciones “a dedo” que ahora ellos en el Gobiernohan llevado a cabo.