Pedro Sánchez ha vuelto a equivocarse. No es fácil encontrar aciertos en las decisiones que viene tomando el secretario general del PSOE, que no acaba de recuperar el espacio de centralidad que siempre ocuparon los socialistas cuando estaban en la oposición.
La última equivocación de Pedro fue dar por hecha una participación de los principales referentes del partido en la denominada Escuela de Buen Gobierno que Ferraz estaba muy lejos de haber amarrado: tan lejos que no asistirán a ella Felipe González, Alfredo Pérez Rubalcaba, Javier Fernández y Ximo Puig, aunque sí lo harán Joaquín Almunia y José Luis Rodríguez Zapatero. Solo Susana Díaz queda por desvelar qué hará.
‘No es no’
¿Debería participar la presidenta andaluza en alguna mesa redonda, con alguna ponencia o en cualquier otro formato? Entre los dirigentes socialistas andaluces parece mayoritaria la opción del ‘no es no’, aunque dejan la decisión en manos de Díaz y apoyarán lo que decida su secretaria general.
Ayer mismo, en un encuentro sin micrófonos con periodistas andaluces, Díaz fue preguntada varias veces por su agenda del fin de semana. ¿Iría a la Escuela de Gobierno? No soltó prenda. La presidenta se limitó a decir que andaba demasiado atareada con los asuntos que de verdad preocupan a los andaluces y que no había tomado una decisión, aunque más bien restó relevancia al hecho de asistir o no.
En contra
Una persona cercana a la presidenta argumenta así su opinión contraria a que Díaz acuda a la cita: “Por supuesto que no debe ir, ella ya no está en esas cosas del partido, debe estar centrada en lo suyo, en Andalucía, en gobernar, en hacer propuestas y ser un referente de las políticas socialistas, lo demás es humo; Pedro ha vuelto a organizar algo sin contar con nadie: pues que asuma las consecuencias y madure un poco. Susana no tiene por qué blanquear los errores de Pedro. Por fortuna, la batalla interna ha terminado, pero cada uno debe estar en su sitio y asumir con coherencia sus responsabilidades. Y sus competencias”.
A favor
Otro interlocutor sostiene, en conversación con EL PLURAL, todo lo contrario: “Debe ir, le interesa ir, independientemente de que a Pedro le venga mejor o peor que ella vaya, que por supuesto le viene mejor. ¿Que por qué debe ir? Porque ya no es importante que vaya o no y porque prometió ayudar a coser el partido y esta es una buena ocasión de hacerlo: yendo allí, ella no pierde nada y el partido gana mucho (o poco, lo que gane), mientras que si no va estará imitando modelo de conducta sectaria de Pedro, el que ha demostrado con su castigo a Elena Valenciano. Por supuesto que no es lo mismo una cosa que otra, pero el mensaje que Susana mandaría a todos los militantes si acudiera a la cita sería muy bien recibido, sobre todo sabiendo como sabe todo el mundo que el partido está en sus horas más bajas y toda ayuda es poca en estos momentos”.
