Lo que para el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, es motivo de orgullo, para las asociaciones de acogida de los inmigrantes sigue siendo una cárcel camuflada. Zoido ha presentado este lunes en Algeciras el nuevo modelo arquitectónico con el que se construirán en el futuro los nuevos Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE).

Con un presupuesto de 20 millones de euros, el nuevo CIE de Algeciras comenzará a construirse a lo largo de 2018 en una parcela de 20.000 metros cuadrados cedida por el Ayuntamiento y contará con nueve edificios residenciales con capacidad para 705 personas.

Será el más grande de España y estará dotado de estancias con aseo y ducha incluidos, enfermería con camas hospitalarias, zona para servicios sociales y ONG, lavandería, sala de juegos y un edificio multifuncional con biblioteca, sala de reuniones y espacios para el culto religioso, entre otros servicios.

Una barbaridad

Y, sin embargo, a las ONG que trabajan con inmigrantes no les gusta. Ni el CIE ‘paradisíaco’ de Zoido ni los que todavía existen. Es el concepto mismo de CIE lo que denigran ONG muy comprometidas como Andalucía Acoge. Para su secretario general, José Miguel Morales, no es una buena idea gastar tanto dinero en estas dependencias: "Seguimos pensando que es muy desafortunado porque todo lo que implique privar de libertad sin que exista delito de por medio es una barbaridad".

En el mismo sentido, para Izquierda Unida “Algeciras no necesita cárceles para extranjeros cuyo único delito es simplemente no tener documentación regulada”, mientras que para Podemos "estos centros son un instrumento de represión ante la grave situación humanitaria que estamos viviendo".

Un referente humanitario

Juan Ignacio Zoido piensa, en cambio, que los CIE son "una herramienta necesaria para hacer efectiva la política migratoria de la Unión Europea, particularmente en lo que se refiere a la lucha contra la inmigración ilegal".

El secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, fue más lejos aún cuando en mayo pasado firmó el convenio de cesión de terrenos con el Ayuntamiento: “Algeciras será el referente de la actuación humanitaria y de la garantía de seguridad que se va a tener en la migración irregular".

Ni nuevo ni viejo

En opinión de Andalucía Acoge, cuyos activistas volvieron a concentrarse en octubre frente al antiguo CIE de Algeciras, “se están destinando importantes partidas económicas a unos centros que no tienen sentido, dinero que podría invertirse en aquellas necesidades reales de la ciudadanía, y cuya obsesión en su mantenimiento solo refleja una política migratoria inútil y represiva, que no entiende de humanidad, sino solo de intimidación y vulneración de derechos fundamentales”.

En un comunicado difundido entonces, Andalucía Acoge recordaba que en julio de este año 180 entidades solicitaron de forma conjunta al Ministerio del Interior que se procediera de forma inmediata a la clausura del CIE de Algeciras, “reivindicación compartida por la oficina del Defensor del Pueblo y por la Fiscalía General del Estado, y cuya única respuesta por parte del Gobierno es el silencio y la referencia a la construcción de un nuevo CIE en la ciudad que ningún sentido tiene, y cuya defensa por parte de quienes lo defienden, sencillamente ofende”. Y añadía contundente: “No queremos CIE, ni nuevo ni viejo”.