No es la primera vez que el bufete Osuna pleitea en temas de paternidad no reconocida por los familiares del difunto, generalmente para no tener que compartir la herencia.
Según adelanta la agencia Efe, un juez ha accedido a la petición del presunto hijo de un fallecido –que en vida amasó una fortuna– para que los familiares se abstengan temporalmente "de llevar a cabo una conducta tendente al acercamiento al lugar donde está inhumado o enterrado su presunto progenitor, en aras a evitar la incineración del cadáver". La tumba está en el cementerio de San Fernando de Sevilla.
El juez que instruye la causa ha dictado el auto prohibiendo a la familia acercarse a la tumba de su pariente mientras se tramita un procedimiento para determinar la paternidad que reclama un presunto hijo del difunto, representado por el despacho de abogados Osuna, que gestiona unas 400 demandas de paternidad. Uno de sus éxitos judiciales más célebres fue el del hijo del matador de toros El Cordobés.
Indicios sólidos
El juez quiere evitar "una posible actuación en ese sentido por cualquier persona, mientras dure el proceso o, al menos, hasta tanto le sean extraídas al cadáver las correspondientes muestras orgánicas para llevar a cabo la prueba de ADN que esta parte tiene interesada, asegurando de esta forma la práctica de la misma".
Además de fotografías en las que se aprecia su parecido con el difunto, el demandante aportó a la causa una partida de nacimiento en la que figura al margen el nombre del padre, así como un documento firmado por una persona que asegura conocer de forma directa los hechos que se relatan en la demanda, en concreto la relación de noviazgo por el fallecido y la madre del demandante.
