Quien le ha preguntado directamente por la cuestión catalana a la presidenta Susana Díaz este jueves en la sesión de control ha sido precisamente su compañero de partido y portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, para quien “hay mucha gente preocupada en España y Andalucía que quiere escuchar la opinión de sus representantes sobre una cuestión tan crucial”.

No al referéndum

El hecho mismo de formular la pregunta desde la bancada socialista es indicativo de hasta qué punto es elevada la preocupación en el partido y en el Gobierno autonómico.

Así lo dejó entrever también Díaz es su respuesta, cuya idea matriz fue la misma que unos minutos antes había desarrollado Mario Jiménez: “Hay que impedir que se siga atacando de esta manera al Estado de derecho, no puede celebrarse un referéndum que es una quiebra muy seria del orden constitucional”.

La democracia sienta bien

Tras formular muy de pasada algunos reproches al Gobierno del PP, Díaz no olvidó hacer una alusión expresa al diálogo, aunque siempre posterior al restablecimiento de la ley: “A este país la democracia le ha sentado bien, por eso el primer reto es restablecer la ley el 1 de octubre y una vez restablecida, la democracia tiene la manera de articular el diálogo y el entendimiento”.

La presidenta recalcó su rechazo a un modelo territorial “de dos velocidades, como insinúan algunos”, defendió que nunca había sido “equidistante” en el conflicto catalán y apostó por soluciones que no pongan en peligro la igualdad entre los ciudadanos.