Juana Rivas, la vecina de Maracena (Granada) que está ilocalizable desde que el pasado 26 de julio incumplió la orden de entregar a sus hijos al padre italiano, tenía previsto comparecer este martes ante los Juzgados de Granada, según anunció a los periodistas su asesora jurídica, Francisca Granados. Y así fue. La comparecencia judicial estaba prevista a als 11:00, pero finalmente se ha entregado en torno a las 11:15. A su llegada, la portavoz de Juana Rivas ha indicado que lo que pedirá es "protección para sus hijos y que sean escuchados". Asimismo, ha asegurado que desde el apsado viernes hay presentada una nueva denuncia por violencia machista.

En estos momentos, y casi un mes después de incumplir la orden de entregar a sus dos hijos a su expareja en Italia, ya ha sido detenida por la Policía Nacional y se encuentra a la espera de declarar ante el juez de guardia, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia andaluz.

La directora del Centro Municipal de la Mujer, que ha asesorado a esta madre desde que el verano del 2016 denunciara a su expareja por malos tratos, ha difundido en las últimas horas distintos mensajes en los que señala que "Juana nos necesita más que nunca", "tenemos que ser muchas y muchos" y que esta madre "no puede estar sola".

Recordemos que este lunes no acudió a la vista en el Juzgado de Primera Instancia 3 para acordar medidas de protección hacia los menores pedidas por su expareja, Francesco Arcuri.

A la salida del juzgado donde se celebró la vista de medidas civiles urgentes, la letrada de Juana Rivas, María Castillo, informó a los medios de comunicación de que la madre seguía protegiendo a sus hijos. "Juana me ha pedido que traslade a la opinión pública que todo lo que está haciendo lo está haciendo por sus dos hijos y, como madre, es la única que siente que, a día de hoy, debe de proteger y seguir protegiendo a los menores ante la desprotección que se le está dando por parte de las personas correspondientes", señaló la letrada.

Castillo también admitió que su representada se encontraba en una situación "legalmente complicada" y que asumía "muchos riesgos" de los que su clienta estaba debidamente informada, al tiempo que avanzó que se seguía "valorando y estudiando" algún tipo de posible entrega de su representada ante la justicia, algo que finalmente podría producirse esta misma mañana.

El periplo judicial de Juana Rivas comenzó en el 2009, cuando su ahora expareja Francesco Arcuri aceptó una condena por un delito de lesiones en el ámbito familiar, y se aceleró en diciembre del año pasado, cuando un juzgado de Granada le ordenó la "inmediata restitución" de sus dos hijos menores a Italia con el padre, que había alegado la "sustracción" de los niños.

Consumidas ya las vías judiciales en España, incluida la negativa del Tribunal Constitucional, Juana Rivas anunció la semana pasada a través de su representación legal que acudiría al tribunal europeo de Estrasburgo para buscar la protección para sus dos hijos, de 3 y 11 años, que cree que todavía no se le ha dado.