Fue una decisión equivocada, encuadrada al parecer en la secular tradición nacional de la picaresca administrativa. La boda de la hija de un concejal de Ronda, oficiada por la alcaldesa socialista, se celebró el día 17 de junio en el Ayuntamiento pero en los papeles oficiales firmados por la propia regidora la fecha que figura es el 21 de junio.

El PP se enteró del caso, atribuyó la falsificación a que “esa diferencia de cuatro días que le habría permitido acceder a un puesto de enfermera en el Hospital de Ronda" y culpó de todo ello a la alcaldesa. Resultado final: el concejal José María Jiménez (PSOE) presentaba ayer su dimisión. Dado que la fecha prevista para la contratación en el Servicio Andaluz de Empleo era inamovible, el cambio de fecha se habría debido a que si la boda hubiese sido antes de firmar el contrato, la enfermera no habría tenido derecho a las vacaciones por enlace matrimonial.

Para el portavoz del PP en Málaga, José Ramón Carmona, “la máxima responsable es la alcaldesa ante hechos tan graves como una supuesta falsedad documental y fraude al SAS, ya que se casó el 17 de junio, pero en el expediente municipal aparece la fecha de 21 de junio, una diferencia de cuatro días que le habría permitido acceder a un puesto de enfermera en el Hospital de Ronda".

El fatídico cambio

Jiménez dio ayer explicaciones tras anunciar su dimisión pero lo cierto es que fueron más bien confusas y no entró en detalles sobre las razones de ese fatídico cambio de fecha. Se limitó a explicar que el cambio fue una decisión que tomó la familia porque así lo deseaba su hija por motivos personales y que antes se aseguraron de que dicha modificación podía hacerse sin problema. "Ella prefería el 21, que es día laborable, y la familia no podía asistir a esa celebración tan importante en nuestras vidas", por ello, "se oficia la boda el 17", explicó.

El concejal socialista desmintió rotundamente que la alcaldesa, Teresa Valdenebro, "haya intentado favorecer a nadie", dejando claro "que no tenía conocimiento; si alguna cabeza tiene que rodar es la mía, es indiscutible". Y así ha sido.

“No hubo beneficio personal”

Jiménez se quejó con amargura de lo sucedido: "Me parece increíble que se metan en mi vida privada de esta manera, dejo de ser un personaje público y, a partir de ahora, el que intente meterse con mi familia me va a encontrar judicialmente".

"Se hizo un cambio de fecha y entendimos que sin más razón y malicia eso era lo que era", ha dicho, recordando que el 17 se celebra la boda y "Teresa oficia la boda; firma unas actas porque entendemos que no hay problema por parte de la familia, es que no lo hay, porque toma efectos el 21, por razones personales estrictamente, que nadie puede decidir por nadie", zanjó.

Tarde para arrepentirse

La alcaldesa, explicó Jiménez, firma las actas del 17, pero la fecha que pone en el documento es el 21: "No hay beneficio personal, sólo y exclusivamente el interés particular de la persona que se casa". ¿Se arrepiente el ya exconcejal de algo? Sí, de no haberle a su hija: ”¿Qué más da, por qué no la dejas el 17?”.

El PP llegó a preguntarse incluso si en la dirección del PSOE malagueño "aprueban este proceder por parte de la secretaria de Relaciones Políticas de la organización a nivel provincial y recién nombrada miembro del comité director del PSOE andaluz. Miguel Ángel Heredia o Francisco Conejo deberían dar una explicación al respecto", clamaba el PP a través de un comunicado.