La Seguridad Social, en un nuevo intento por mitigar la creciente desigualdad económica, ha anunciado que abrirá la convocatoria para obtener una nueva ayuda mensual para familias en situación de vulnerabilidad.
Esta prestación, que aportará hasta 1.500 euros al mes a los hogares más necesitados, forma parte del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y pretende garantizar a las familias sin recursos una aportación económica constante que contribuya a cubrir las necesidades básicas de la unidad familiar.
La implementación de esta ayuda ha sido objeto de fuertes críticas debido a lo complejo de los requisitos para acceder a ella, y la enorme cantidad de papeleo y burocracia que acarrea el proceso de solicitud, complicando poder cobrarla finalmente.
Los solicitantes deben cubrir con una serie de requisitos, a saber:
- Residir legalmente en España y de manera continuada, durante al menos el año anterior a la solicitud de la ayuda
- Estar inscrito en la Seguridad Social, y haber cotizado en ella con anterioridad
- Demostrar una situación económica de precariedad
- Acreditar la composición de la unidad familiar (mediante matrimonio, pareja de hecho o parentesco de hasta segundo grado) con al menos seis meses de antigüedad
Además, deben presentar numerosa documentación, que puede ser complicada de obtener para personas en situación de exclusión social, de hecho, muchas de las solicitudes que son denegadas se deben a la presentación de documentación o datos incompletos, no a la falta de derecho sobre ella.
Se recomienda a las personas que quieran solicitar la prestación que revisen exhaustivamente los requisitos, ya que una presentación de solicitud incompleta podría hacer que fuese rechazada.
La cuantía que percibirán estas familias varía en función de la composición de la unidad familiar y de los ingresos existentes.
¿Cómo conseguir la ayuda de la Seguridad Social?
La administración aconseja, para agilizar el trámite, que los interesados se aseguren de tener todos sus documentos escaneados y en PDF, que adjunten un resumen de ingresos de la unidad familiar y que comprueben que el formulario que están completando está actualizado, ya que cambia en cada ejercicio.
Es conveniente presentar toda la documentación de una sola vez, ya que las subsanaciones añaden semanas de espera al trámite.
Es conveniente tener presente que existen criterios de incompatibilidad que pueden hacer que el solicitante quede fuera de la lista de concedidos, como son ingresos superiores por encima del límite asignado para su unidad familiar, que algún miembro de esta cobre alguna pensión contributiva o algún subsidio similar, o que se detecte un empadronamiento ficticio – personas que hagan ver que conviven con esa unidad familiar, sin ser esto cierto -.
Pese a lo loable de esta medida, diversos organismos denuncian que el proceso largo y dificultoso está obstaculizando la obtención de la ayuda por todos los que la necesitan, poniendo en duda por tanto la eficacia del programa, llegando a afirmar que detrás de esta aparentemente buena iniciativa se pretende dificultar el acceso, al añadir complejidad a un proceso que ya era largo.
Es fundamental que las administraciones públicas trabajen por y para los ciudadanos, ahorrándoles trámites engorrosos y complejos que lo único que consiguen es que estas ayudas no lleguen a cumplir su cometido.