La fama se la llevan los camaleones, pero un grupo de Harvard ha descubierto que determinados cefalópodos, como la sepia, disponen de un mecanismo que les permite camuflarse hasta tal punto que pueden desaparecer por completo, mimetizándose con el color y la textura de rocas y corales para despistar a sus depredadores (el fenómeno se denomina camuflaje adaptativo). La investigación se está llevando a cabo con el objetivo de crear un camuflaje perfecto para el ejército de los Estados Unidos. Y se ha descubierto que el pulpo, y sobre todo la sepia común, tienen unas características idóneas para el camuflaje, Esta segunda tiene la piel cubierta de unas células que reflejan la luz, llamadas cromatóforos. Tienen capacidad de mutar para cambiar su color y estructura, y eso les permiten adoptar formas y texturas propias de los objetos de su alrededor de manera muy rápida

Células luminiscentes.

Hasta ahora se creía que eran solo órganos de pigmentación, que actuaban filtrando colores de manera selectiva. Es decir, la sepia les indicaba qué color mostrar dependiendo de los colores de su alrededor para urdir el engaño. Pero el mencionadoestudio de Harvard, liderado por Leila Deravi y Kevin Kit Parker, sugiere que contienen nanoestructuras luminiscentes que permiten a la sepia para hacer cambios rápidos y complejos en la pigmentación de la piel.