¿Qué podría gustarle más a un científico que viajar en el tiempo? En lugar de andar escarbando la tierra o picando rocas y extrayendo conclusiones de manera trabajosa con una brocha, encontrarse con los restos tal y como quedaros depositados en su día.

Lo que Larsen C dejó

Es lo que espera encontrar la primera expedición científica que va a investigar el trozo de hielo que quedó expuesto cuando hace unos meses una enorme masa de hielo se desgajó del continente Antártico. Un equipo de British Antartic Survey llevará a cabo la investigación.
Los expertos esperan encontrarse con un ecosistema liberado después de calculan unos 120.000 años divierto por hielo.
Es el resultado de milenios de hielo que creó la superficie de Larsen C que casi un año después de soltarse sigue navegando por las aguas del Atlántico Sur. La expedición llegará a las Islas Malvinas dentro de dos días y desde ahí dará el salto al continente helado. En total esperan investigar una superficie de más de 5.000 kilómetros cuadrados, lo que significa un área tres veces el tamaño de Nueva York.

Contrarreloj

Los científicos no son capaces de aventurar qué van a descubrir en los tres meses que durará el proyecto. Esperan encontrar nuevas especies o, mejor dicho, especies animales antiguas ya desaparecidas que ayuden a comprender cómo era la Tierra en aquel entonces y cómo ha sido el proceso que nos ha llevado hasta aquí. Otra cosa es que eso sea posible. Los mismo miembros del equipo advierten que lo suyo es también una carrera contrarreloj. Después de todo ese tiempo protegido por una inmensa capa de hielo, la exposición a medio ambiente, la pérdida de presión y el calor degrada esos entornos a gran velocidad.