Buuuuuuuuu. ¿Recordáis aquello de la clonación? Lo de la oveja Dolly hace ya dos décadas. Cuando Ian Wilmut anunció al mundo que había conseguido clonar a un mamífero enseguida empezamos a pensar en cuánto tardarían en clonar humanos. Que si Cristo, que si Einstein, que si, claro, Hitler. Pero lo cierto es que aquello no ocurrió.

Primeros monos

Aunque veremos ahora. Unos científicos chinos han anunciado el nacimiento de dos monitos clonados. Para conseguir semejante logro científico han seguido la misma técnica que Wilmut implementó en 1996. Lo relevante del caso es la especie. Después de Dolly se ha conseguido clonar otras 23 especies de mamíferos. Pero hasta ahora, los considerados superiores, como estos dos primates, parecían mantener bien guardado su secreto genético. Hasta que los investigadores del Instituto de Neurociencias de la Academia Nacional de las Ciencias Chinas lo han logrado. El método utilizado ha sido el de la transferencia nuclear. Ese sistema permite crear individuos idénticos a partir del material genético de la célula del donante. En este caso de la donante, ya que se utilizó fibroblastos del tejido de un feto de mona. Este material se introdujo en dos óvulos vacíos que, una vez fecundados, se insertaron en el útero de dos hembras distintas.

Posible con humanos

Mu-Ming Poo, jefe del grupo de científicos que ha realizado la clonación no se ha quedado corto a la hora de hacer el anuncio. Para él, una vez superada la barrera técnica y tecnológica que impedía clonar primates, ya no existe impedimento científico para hacer lo mismo con humanos. Aunque también quiso tranquilizar al público y aseguró que se trata solo de una posibilidad, pero que en ningún momento se plantean hacer algo así. En realidad, según sus explicaciones, lo de clonar animales tiene como objetivo investigar acerca de distintas enfermedades y cómo unos individuos pueden desarrollar cáncer o patologías genéticas y otros, idénticos, no.