Puede que sea un evento en el ojo del huracán. Sobre todo cuando juzgamos, comparamos y establecemos una competición entorno a la belleza de las mujeres. Pero somos así. Nos gusta comparar cosas tan subjetivas. Tanto que lo hacemos incluso con nuestras mascotas. Perros, gatos y camellos.
Camello miss Universo
Sí, camellos también. Todo es cuestión del animal más común en el sitio del que hablemos. En este caso Arabia Saudí. Resulta que en este país hay un prestigioso concurso de belleza para camellos.
El certamen se integra dentro de un festival mayor dedicado a este animal, tan unido a las tradiciones y costumbres saudíes. El Festival King Abdulaziz Camel dura 28 días y se celebran decenas de eventos relacionados con este cuadrúpedo.
Pero el momento cumbre es el concurso de belleza de camellos. Cómo será la cosa, que hasta ha empezado a haber trampas. En esta última edición, nada menos que doce camellos han sido descalificados. Y todavía sorprende más la razón. Los dueños les habían hinchado la cara, especialmente los labios, con botox.
Como estrellas
Así, como estrellas de Hollywood decadente comparecieron los pobres animales. Pero la organización enseguida se percató de la argucia. Las normas son estrictas en ese particular. Los camellos no pueden presentar ninguna modificación radical como la aplicación de sustancias químicas en los labios, afeitados, teñidos o modificaciones estéticas. No respetar estas normas implica la expulsión inmediata.
Al parecer, en los últimos años se ha extendido la práctica. Los dueños inyectan botox a los camellos con el fin de que sus caras parezcan más firmes y su gesto más juvenil. La cara hinchada es un rasgo determinante para calificar la belleza de los animales.
Detrás, una vez más, la avaricia humana, esa que no se puede disimular. No en vano, en este certamen se reparten más de 50 millones de euros en premios.
