Hasta ahora las lentillas o lentes de contacto se usaban tanto en niños como en adultos para corregir los problemas refractivos de la visión como la miopía, hipermetropía y el astigmatismo. Pero esos defectos de la visión seguían aumentando con la edad. Ahora, un laboratorio ha demostrado que puede frenar ese avance de las dioptrías necesarias en la miopía, al menos en un 59% de los casos. Esta es de esas noticias que nos gusta dar cuando la investigación de laboratorio llega a las manos, en este caso los ojos, de las personas para mejorar su calidad de vida. Tras tres años de estudio, el 95% de los pacientes no notan la lente, el 75% consideran muy fácil ponérsela y el 95%, muy sencillo quitársela.

Tratamiento con lentillas pionero en todo el mundo

Estas lentes de contacto controlan en un 59% el crecimiento de la miopía en niños, tal y como demuestran los resultados del estudio que se presentó en la Conferencia Clínica de la British Contact Lens Association en Liverpool, Inglaterra, así como en un segundo estudio que ha sido publicado por la Academia Americana de Oftalmología.
Durante tres años el estudio, realizado con 144 niños miopes de entre 8 y 15 años de Singapur, Canadá, Inglaterra y Portugal, ha sido el primero en ofrecer datos concluyentes del grado de eficacia de las lentes MiSight, certificadas e indicadas por las autoridades sanitarias para el control de la miopía.
Además, los tres años de investigación invertidos lo convierten en el tratamiento para el control de la miopía con mayor muestra temporal a nivel mundial. Los resultados obtenidos durante tres años mostraron que la lente fue bien aceptada por los niños y no afectó a sus actividades diarias en el colegio, leer, jugar en el exterior y usar ordenadores. [caption id="attachment_12818" align="alignnone" width="505"]lentillas miopía MiSight ©CooperVision[/caption]

Un estudio “a ciegas”

Para comprobar la eficacia del tratamiento sin posibilidad de interferencias, este estudio ha sido doble enmascarado, es decir, que ni los pacientes, ni los médicos sabían si usaban lentes MiSight o de control (lentes normales). Los niños de ambos grupos manifestaron una mayor satisfacción con las lentes de contacto frente a las gafas. El 95% de los mismos afirmaron no notar la lente, el 75% consideraron muy fácil ponérsela y el 95%, muy fácil quitársela.

La miopía se convertirá en una pandemia en los próximos años

En el año 2000 se registraron alrededor de 1.400 millones de miopes; en 2020, esta cifra aumentará a 2.600 millones de miopes; y en 2050, alcanzará los 5.000 millones. El componente genético es importante. Un padre miope multiplica por tres la probabilidad de tener miopía y la cifra aumenta a seis si los dos progenitores son miopes. Aunque uno de los factores que los expertos consideran más relevantes es el de la exposición a las horas de luz; es decir, cuanto más tiempo pasan los niños bajo luz artificial, más fácil es que desarrollen miopía. “El crecimiento de la miopía ha sido vertiginoso y ahora afecta a la gran mayoría de jóvenes adultos en algunos países, especialmente en el Este de Asia” subrayó Arthur Back, Chief Technology Officer de CooperVision y voz líder en el control de la miopía.
“No es solo una visión borrosa, sino que también incrementa la probabilidad de desarrollar complicaciones oculares a lo largo de la vida como glaucoma, catarata, desprendimiento de retina y maculopatía miópica si no se trata”. “La intervención temprana de los padres, junto con los profesionales de la visión, es esencial para la salud y el bienestar a corto y largo plazo de sus hijos”, aseveró Back.
Fuente: www.ControlDeMiopia.com