Estos noruegos... Desde luego parecen dispuestos a acabar con esa imagen idílica que tenemos de los escandinavos. Gente culta, pacífica, tolerante y amante de la naturaleza. Primero andan liados cazando ballenas y poniendo pegas a cualquier iniciativa encaminada a protegerlas. Ahora se han empeñado en perforar el Ártico en busca de petróleo.

Recesión y deshielo en Noruega

Dos han sido los motivos que han empujado a los noruegos un poco más al norte con las perforadoras. El primero es simplemente económico. El desplome del precio del crudo, del que Noruega es uno de los principales productores europeos, ha empujado el déficit de su PIB hasta el 8%. Ha sido el último clavo en la crisis del país, que hasta ahora había evitado lo peor de la recesión, pero ahora ha caído a plomo en ella. El otro motivo no puede ser más irónico. Buena parte del hielo del Círculo Polar Ártico se ha retirado a causa del cambio climático. Los noruegos han visto agua donde antes había duro hielo. Y así es mucho más fácil perforar.

"Investigaciones científicas"

Así que han comenzado a planificar las operaciones. Como en el caso de las ballenas han aducido intereses de investigación en las primeras exploraciones. El ministro de Asuntos Exteriores, Børge Brende, ha puesto una de esas excusas que por no pedidas, resultas reveladoras. “Debemos encabezar el conocimiento y estudio científico del Ártico. Eso nos hará más competitivos en el mercado mundial”. La relación entra la segunda parte de la declaración y de la primera es clara.

Greenpeace demanda

Así lo ha visto Greenpeace que, con el precedente de las ballenas, no se fía. Por eso ha puesto en marcha la campaña Save The Arctic. La organización ecologista denuncia que la empresa estatal de petróleos noruega, Statoil, plantea una estrategia agresiva de perforación en aguas árticas. Por este motivo, Greenpeace ha decidido llevar al gobierno noruego a los tribunales en defensa de los espacios naturales. Y del respeto a los acuerdos de París que, según ellos, violan estas prospecciones. Su base es el artículo de la propia constitución noruega que proclama que todos los ciudadanos tienen el derecho y el deber de proteger la naturaleza del país. Esperemos que tengan suerte.