El cerebro sigue siendo un gran misterio. No solo cómo realmente funciona. Sobre todo, cómo se va configurando a lo largo de nuestra vida. Cómo nuestras actitudes y habilidades lo modifican. Y las implicaciones que esto tienen sobre otros aspectos.

Distinguir discursos entre el ruido

Por ejemplo, un nuevo estudio ha revelado cómo los músicos son capaces de distinguir y segregar sonidos. No solo los relacionados con la música, sino también los fonemas correspondientes al habla. Es decir, los músicos son capaces de distinguir mejor los discursos, el habla, incluso en situaciones de mucho ruido. El análisis, realizado por investigadores de la Universidad McGill de Montreal, en Canadá, se realizó con 30 sujetos de muestra. 15 músicos y 15 personas que no tenían formación musical alguna. A todos los sujetos se les conectaron electrodos en la cabeza que captaban las reacciones cerebrales. Los 15 músicos superaron a los que no tenían formación en la identificación de sílabas, especialmente en las situaciones ruidosas: de esta manera, según los investigadores, se confirman los beneficios que la educación musical tiene en otros aspectos como el habla.

Aplicación a problemas auditivos

Los expertos afirman que la habilidad del habla se asocia con la activación mejorada de las regiones auditivas inferior izquierda y frontal derecha del cerebro. En este mismo análisis reveló que los patrones neuronales relacionados con los sonidos de los fonemas presentan mas variaciones en las regiones auditivas y del habla de los músicos que en aquellos que no tienen conocimientos musicales. Como siempre, estas investigaciones van mucho más allá de los que pueden parecer unas conclusiones inútiles. Según los expertos, estas certezas permitirán aplicar procesos de aprendizaje de música a aquellas personas que presentan problema con el habla y en el oído. El aprendizaje musical permite desarrollar representaciones fonológicas más finas y una mejor conectividad funcional entre áreas del cerebro.