El reino animal, antes de que acabemos con él, sigue asombrándonos con su belleza. Criaturas evolucionadas durante millones de años que nos sorprenden por la capacidad de la naturaleza para encontrar soluciones alucinantes a los desafíos que le plantea el entorno. Por ejemplo, la jirafa. El ejemplo paradigmático de cómo ha avanzado la vida en la Tierra.

Primero la madre

Su largo cuello nos habla de cómo la especie fue adaptándose a alcanzar los brotes más altos de los árboles. Y cuanto más largo era el cuello, más y mejores brotes de alcanzaban. Y los que tenían el cuello más desarrollado, tenían mayores posibilidades de reproducirse. Así hasta llegar hasta los seis metros de altura. Pero la jirafa todavía puede ser más sorprendente y fascinante. Los Rangers de Conservación de la Reserva de Garissa, en Kenia, han conseguido filmar un ejemplar increíble. Se trata de una jirafa albina. Un enorme animal completamente blanco que se mueve entre los árboles, ajenos a la impresión que crea.

Y luego la hija

Los Rangers habían oído hablar del animal a los habitantes locales, sin darles demasiado crédito. Decidieron salir en su búsqueda. Y lo que encontraron fue todavía más fascinante de lo que esperaban. No solo encontraron a la hembra completamente blanca. Además iba acompañada por su cachorro. Una pequeña jirafa de más de dos metros. Y que había heredado la disfunción en la pigmentación de su madre. Dos animales ya de por si hipnóticos a los que un fallo genérico ha convertido en seres especiales. Los Rangers lograron filmar a la pareja. Aseguran que mientras que en la cría sí pueden apreciarse algunas manchas o contornos, la madre es completamente blanca. Ahora solo queda esperar que su descubrimiento y la popularización del vídeo en el que se ve a madre y cría no despierte el ansía de los cazadores. Tanto de los furtivos, como de los cazadores occidentales que están dispuestos a pagar fortunas por abatir uno de estos bellos animales. [embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=9Qz2ivAd4kQ[/embedyt]