La capacidad del ser humano de modificar la faz de la Tierra adquiere cotas difíciles de imaginar cuando nos enfrentamos a las grandes obras de ingeniería. Y estos días se completa la mayor de estas obras jamás acometida por el hombre: la presa de las Tres Gargantas en China.

El ascensor más grande del mundo

Después de la finalización de los trabajos en la presa en sí, estos días se han culminado el sistema de esclusas que elevará los barcos a su paso por la megaestructura. La información ha sido publicada por el periódico China Daily. Este ascensor es, como no podía ser de otro modo, el más grande construido para barcos. Permitirá superar 113 metros de desnivel a embarcaciones de hasta 3.000 toneladas.

La presa cambió el eje de rotación

De este modo se pone fin a esta obra que ha tardado 23 años en completarse. No solo sorprende el tiempo que ha necesitado para crear la enorme masa de hormigón que embalsa el río Yangtsé. El dique tiene una altura de 200 metros y una anchura de 2.300. El volumen de agua embalsada será de 40.000 millones de metros cúbicos en una superficie de 632 kilómetros cuadrados. Un dato sorprendente es que esta enorme masa de agua concentrada hizo variar dos centímetros el eje de rotación de la Tierra en 2011. El salto de agua producido generará 18,2 millones de kilovatios a partir de sus 32 turbinas. En la actualidad, la presa suministra el 3% del consumo energético chino.

Efectos secundarios

En el lado negativo está el enorme impacto que la presa ha tenido sobre la población local. Las autoridades defendieron en 1993 la necesidad del proyecto para proteger de las constantes inundaciones a 15 millones de personas. Sin embargo, un millón y medio de habitantes de la zona fueron desplazados al ubicarse sus pueblos y ciudades en terrenos anegados. Además, 1.500 fábricas y 16 yacimientos arqueológicos se han perdido para siempre bajo miles de hectómetros cúbicos de agua. Y además, está en impacto medioambiental de la presa. Este los más destacados, los expertos aseguran que los sedimentos que arrastra el río Yangtse, el más largo del China y tercero del mundo, serán un peligro para el dique. Además, vaticinan cambios drásticos en el clima de la zona que afectarán a los ecosistemas del entorno. También preocupan a medio y largo plazo las implicaciones geológicas de la acumulación de agua en un punto.