El nadador y defensor de los océanos Lewis Pugh se ha tirado a las frías aguas del mar de Bellingshausen, en la Half Moon Island, para desafiar al cambio climático. A nado durante un largo y gélido kilómetro, que recorrió en algo más de 17 minutos, Pugh ha inaugurado así su campaña Antártica 2020, para llamar nuestra atención sobre la necesidad de declarar tres nuevas áreas marinas protegidas en la Antártida. El esfuerzo del nadador es aún mayor si se valora que ha sido operado recientemente de la espalda, y perdido potencia por ella en los brazos.

Ya hay un área protegida

Durante los próximos tres años, este reconocido atleta inglés y su equipo construirán una coalición para reivindicar que para 2020 se establezcan tres Áreas Marinas Protegidas adicionales en las áreas vulnerables de la Antártica Oriental, el Mar de Weddell y el mar de Bellingshausen. No es ninguna utopía, no son molinos, porque ya en en octubre se declaró otra franja anártica, el Mar de Ross, como Área Marina Protegida. Pugh cuenta con el apoyo de las Naciones Unidas, así como de importantes líderes mundiales, científicos, ambientalistas, políticos y activistas por la paz. Los beneficios de establecer reservas protegidas en los océanos residen en hacerlos más resistentes al cambio climático, y permitir a otros océanos recuperarse de la sobreexplotación pesquera. No es la primera vez que el atleta se enfrenta a una hazaña así... https://www.youtube.com/watch?v=-OpCnfzv3o8